Análisis de MXGP 2021: motocross, barro, velocidad y una cuesta muy empinada

  • El videojuego oficial del Campeonato del Mundo de Motocross vuelve con una nueva entrega

  • Hasta 40 pilotos oficiales, todas las motos, equipos y pruebas del Mundial

  • Un juego entretenido y realista, pero con una curva de dificultad cuesta arriba

Milestone tiene cogido el punto a los juegos de motor, sobre todo sobre dos ruedas, y ya hemos analizado muchos de sus títulos como MotoGP 2022 o Ride 4, el primero es el simulador de la competición de motos más famosa del mundo y el segundo es el simulador de motocicletas de calle de más éxito. Y, aunque el motocross no es una disciplina tan masiva como las anteriores, también tiene a su legión de fans. Aquí podemos elegir entre Monster Energy Supercross 4 y las entregas anuales de MXGP.

Este MXGP 2021 que ya está disponible es el juego oficial del Campeonato Mundial de Motocross 2021 y cuenta con sus más de 40 corredores, todos los equipos, las pistas y las motos oficiales de la temporada de este año en la MXGP y la MX2 2021. Aunque es un título muy continuista con la edición de 2020, los fans del Mundial y jugadores de ediciones anteriores lo acogerán con los brazos abiertos. Eso sí, los que lleguen de nuevas se encontrarán con un título algo difícil, con una curva de aprendizaje muy elevada y pocos modos e incentivos para adentrarse en él.

El título no cuenta con muchos modos de juego, pero si cuenta con el típico Modo Carrera, que te da la oportunidad de crear a tu corredor y llevarlo a lo más alto de la competición ganando carreras, campeonatos y subiendo de categoría. Aquí puedes elegir un equipo real o crear el tuyo propio, comenzando en la categoría MX2 y subiéndolo a la categoría reina. Este año, ofrece más inmersión gracias a las Transferencias Reales, Contratos, Equipo Personal, Desafíos y actividades adicionales

Además de este modo, puedes jugar el Modo campeonato, para jugarlo en su totalidad con tu piloto favorito, elegir Grandes Premios individuales, pruebas rápidas o contrarreloj. MXGP 2021 ha preparado también cuatro Legacy Tracks, carreras emblemáticas procedentes del legado de la serie. Se trata de Ottobiano (Italia), Ernée (Francia), León (Méjico) y Agueda (Portugal), que estarán disponibles para un jugador y en el multijugador.

El nuevo modo Waypoint, por su parte, ofrece la posibilidad de entrenar en el Playground, crear desafíos personalizados y compartirlos con los amigos. Además, los jugadores pueden descargar otros circuitos de la base de datos de la comunidad.

Sin un alarde técnico extremo, aunque las ediciones de nueva generación lucen muy bien, el juego se inclina hacia la simulación, con ligeros toques arcade. Aquí es más importante los movimientos del piloto, el balanceo de su cuerpo sobre la moto en los saltos y giros, más que la propia velocidad. Ser capaz de colocar los neumáticos en las rodadas, saber frenar a tiempo, derrapar de la mejor manera para encarar la siguiente curva, echar el cuerpo hacia delante para superar algunos obstáculos, etc. Aquí las físicas, muy logradas, ayudan mucho al gameplay.

No es tan duro como otros juegos de motocross, pero sigue siendo un juego difícil de dominar, que requerirá de muchas horas para terminar de cogerle el punto a la gravedad, la velocidad y lo resbaladizo del barro y los saltos del circuito. La curva de dificultad, ya lo hemos dicho, es elevada, pero los fans con mucha paciencia podrán llegar a dominarlo. Lo bueno es que, sin ser un experto, puedes terminar una carrera en una posición digna con unos pocos minutos de práctica.

También se agradecen los modos multijugador, que presentan mejoras que incluyen calificaciones en los lobbies online. Y el ‘Editor de Pistas’, donde podemos diseñar nuestros propios trazados de manera relativamente sencilla, para luego disfrutar corriendo en ellos o compartirlos con amigos.

En definitiva…

La entrega de este año de MXGP contentará a los fans que cuentan con ella cada año y, en general, a los fans del motocross, pero es cierto que se hecha en falta un poco de innovación, ya que se parece mucho a la entrega del año pasado. Los que quieran iniciarse en esta competición de velocidad, barro y saltos imposibles, tendrán que ponerle imaginación y horas para pillar los conceptos de este complejo simulador que, además, no ayuda demasiado al no contar con tutoriales, ni minijuegos donde practicar y una interfaz tan poco amable.