Ángel Saldaña, capitán de la UME, sobre el rescate en Turquía: "La temperatura no es adecuada para las víctimas"

Tras el fuerte terremoto que sacudió Turquía y Siria el pasado lunes, el equipo de la UME sigue llevando a cabo sus labores de rescate. Ángel Saldaña, Capitán de la UME, conecta en directo con 'Todo es mentira' para darnos las últimas noticias sobre la liberación de las víctimas.

"Estamos en la base de operaciones. El rescate es complicado, pero estamos muy motivados por las dos víctimas vivas que conseguimos sacara ayer. Estamos trabajando una zona en la que sabemos que hay personas vivas, se les escucha perfectamente sin instrumentos. Estamos haciendo un butrón y esperamos sacarlos de ahí en las próximas horas", cuenta Saldaña.

Marta Flich ha preguntado al Capitán por los métodos empleados para localizar víctimas entre los escombros. "Son trabajos muy técnicos para localizar a las posibles víctimas. Utilizamos perros y métodos técnicos. Poco a poco acotamos el área donde puede encontrarse la víctima. Hay que ir con mucho cuidado y mucha seguridad para no dañar a las víctimas", ha explicado él.

La presentadora también ha querido saber cómo afectan las bajas temperaturas al rescate. "Estamos a 5 o 6 grados . Por la noche a menos 4 o menos 5 No son las mejores o condiciones para que una víctima siga con vida, pero creemos que podemos encontrar más víctimas con vida y lo vamos a seguir intentado", ha dejado claro él.

George Sabé denuncia la situación en Siria

'Todo es mentira' contó con el testimonio de George Sabé, un ciudadano Sirio que denunciaba la poca atención que estaban recibiendo allí las víctimas:

“Todo lo que habéis hablado de Turquía aquí es mucho más grave, después de cinco años de guerra nos viene el terremoto. El terremoto nos llega en un momento en el que no había luz, en Alepo tenemos dos horas de luz al día, hace frio, estaba lloviendo, la gente se levantó por el terremoto y se sentían perdidos y la gente salió a la calle”, explicaba George.

"Estoy a 30 kilómetros del epicentro, lo he sentido en mi cuerpo y veo como está la gente perdida. Ellos también merecen vivir, merecen tener derecho a la ayuda, merecemos ser hombres y mujeres del siglo XXI como cualquier persona que está viviendo hoy en día”.