Ángel esperaba sentir un chispazo al ver a la mujer con la que iba a cenar en ‘First Dates’ y al no sentirlo se le ha comido la lengua el gato. Cristina se ha pasado toda la cita sacando temas de conversación pero no lo ha conseguido “Tengo más diálogo con mi perro que con él”.
Cristina ha llegado a ‘First Dates’ muy nerviosa e incluso, Carlos Sobera ha tenido que salir a buscarla porque no se atrevía a pasar. Ella es una mujer muy abierta, pero necesita que le den pie para ella sino “como no me des nada, te doy cero”, ha asegurado. Tras charlar un poquito con Carlos Sobera y con Matías, Cristina se ha relajado e incluso, ha sentido que podía ser una señal que su cita se llamara igual que su padre “Así se llamaba mi padre, tiene puntos por eso”.
Sin embargo, esos han parecido ser los únicos puntos que ha tenido Ángel a su favor. La cita ha comenzado bien, pero al comprobar que no sentía mariposas en el estómago, los nervios se han apoderado de Ángel y le han dejado mudo. Cristina ha intentado sacar múltiples temas de conversación, pero él no le ha seguido. Llegando a que afirmara que la cita era aburrida “Tengo más diálogo con mi perro que con él”.
En un momento dado de la cena, Ángel le ha confesado a Cristina que no había sentido un flechazo por ella y al saber que era mutuo, ha respirado y ha cambiado por completo su actitud. Ángel se ha relajado, le ha propuesto a Cristina quedar como amigos para salir de fiesta y ella incluso, le ha dicho que le podía presentar a sus amigas por si con ellas sí surgía el amor. Eso sí, ambos han tenido claro que quería volver a cenar en ‘First Dates’ y que se iban a volver a presentar al casting.