Controles de temperatura en aeropuertos, dos semanas de cuarentena y seguimiento telefónico. Es la bienvenida a España desde esta semana y mientras dure el estado de alarma. Una medida que ha puesto en jaque al sector turístico.
España no es el único país que aplica cuarentena a quienes llegan. Al menos 18 estados europeos siguen haciéndolo aunque algunos como Italia y Grecia son más flexibles que es lo que ha recomendado empezar a hacer esta semana la Comisión Europea y lo que reclaman los hoteleros para salvar el verano.
Las islas tienen mayor dependencia del turismo internacional. Mallorca intenta convencer al Gobierno de la apertura de fronteras con una prueba piloto. Las declaraciones del ministro de Consumo esta semana tampoco han ayudado al sector, que ha llegado a pedir su dimisión.
El turismo mueve un 13% de nuestra economía y de él depende 2,7 millones de trabajadores. La patronal demanda un paquete de ayudas específicas como están haciendo Italia o Francia. De momento, España les ofrece las mismas ayudas que al resto de empresarios y autónomos: avales, créditos y prorrogar los ERTES. Unas medidas con las que no todos creen que puedan subsistir.