Hotel dulce hotel

El hotel de lujo que está en Nueva Orleans y en el que se aparece una monja a los pies de la cama

El hotel de lujo que está en Nueva Orleans y en que se aparece una monja a los pies de la cama Cuarto Milenio Temporada 20 Top Vídeos 632
El hotel de lujo que está en Nueva Orleans y en que se aparece una monja a los pies de la camacuatro.com
Compartir

Una semana más, Carmen Porter trae hasta la nave del misterio una de esas historias que nos dejan sin respiración. En 'Hotel, dulce hotel', la presentadora rescata las leyendas y testimonios que tienen como protagonistas distintos hoteles y hostales de cualquier parte del globo y en los que aseguran ocurren fenómenos paranormales.

En esta ocasión, Carmen Porter nos habla del 'Bourbon Orleans', un lujoso establecimiento que no siempre fue un lugar en el que los turistas adinerados pasaban la noche. El edificio, que fue construido en el año 1815, empezó siendo un teatro en el que la población del barrio francés de Nueva Orleans disfrutaba de las óperas del momento.

Pese al éxito inicial, el teatro acabó perdiendo fuelle entre los estadounidenses y hacia el año 1886 un grupo de monjas decide comprar el edificio. Desde ese momento, las religiosas transforman el espacio en un orfanato para niños de la zona y como no, tienen una capilla.

El grupo de monjas del orfanato

Lo que en el pasado fue un sala de baile se convierte en una capilla en las que las religiosas rezan por la vida de los pequeños que, tras contraer la fiebre amarilla, empiezan a morir por decenas. En 1960 había tantos niños y monjas que les cuidaban que el recinto se les quedó pequeño. Las monjas entonces deciden venderle el edificio a un empresario hotelero que lo transformará en un hotel de lujo con 218 habitaciones.

Pero hay una habitación en concreto en la que son muchos los que aseguran que ocurren fenómenos extraños: "Hay que tener mucho valor para alojarse en esa suite porque hay varios testimonios que aseguran que a los pies de la cama se aparece por las noches el espectro de una monja que te observa desde los pies de la cama".

Y es que esa misma habitación fue una vez la celda de una de las religiosas que, sobrepasada por la muerte de los niños del orfanato, decidió quitarse la vida. Pero esta no es la única aparición del hotel. Quien se aloja en él puede ver también a un soldado confederado, a una dama bailarina o incluso escuchar las voces de los niños que jugaban en el patio.