Sumar registra una ley para introducir una nueva casilla en el documento nacional de identidad que permite a padres dejar el sexo del bebé en blanco hasta que manifieste su identidad "real".

El nuevo DNI con el que sueña Sumar mostraría en la casilla de sexo como "no binario" para que cualquier persona pueda elegir su identidad de género, tanto en el DNI como en el pasaporte. Es decir, ya no aparecería la M si somos hombres o la F si somos mujeres, sino la opción de no binario, aunque no se sabe muy bien cómo vendría reflejada.

Imaginemos que existe esta propuesta y nace un bebé y es intersexual, que sus cromosomas y sus órganos sexuales no entran dentro de los patrones con los que se asocia a un hombre y a una mujer. Con esta nueva ley, los padres podrían dejar su género en blanco hasta que esa persona decida cuál es su identidad. Hasta ahora, tenían un plazo de un año para decir cuál era el sexo del bebé, pero con esto no habría plazo y sería la propia persona quien determinase su sexo y no sus progenitores.

Además, esta iniciativa recoge otras cuestiones respecto a los menores. Quieren prohibir las intervenciones quirúrgicas a menores de 12 años intersexuales. En este caso, también daría igual si es por motivos estéticos o por identificarse con un género.

Sumar quiere estos cambios para lo antes posible y da un plazo de un año a todas las administraciones públicas para la aplicación de estas medidas. Sin embargo, hay que recordar, que antes necesitan al menos la mayoría simple de la Cámara para que la ley se tramite en el Congreso.