Peña, el ejecutivo agresivo pero poco sexy

El pretendiente ha querido demostrar que puede llegar a ser muy sexy sin tener que desnudarse ni enseñar su torso. Pero cuando ha acabado el desfile, a todos le ha parecido muy poca cosa el reto. Él se ha defendido asegurando que un ejecutivo no va mostrando sus encantos como si fuera un stripper. Finalmente, Peña se ha emocionado con las malas críticas y ha hecho que Anais le dé una segunda oportunidad.
