Eva da las calabazas más elegantes de ‘First Dates’: “El tiempo que emplees conmigo no lo vas a poder utilizar en la búsqueda del amor que deseas”

  • Nicolás busca un amor a lo John Lennon y Yoko Ono: “Desnudos en una habitación”

  • Eva tiene un lenguaje exquisito: “Las palabras me gustan mucho, son mi juguete favorito”

  • Eva: “Mi yo intelectual necesita mucha alimentación”

Eva se define “como un jardín inglés en el que hay plantas muy variadas y parece que hay un poco de caos, pero está todo en orden”. Es intérprete y traductora, y colabora con un equipo británico que se dedica a la investigación criminal, pero de momento no trabaja para la Reina como James Bond. Físicamente busca a un hombre con “Una boca que le apetezca besar y unas manos que le apetezca sentir… No demasiado blanco lechoso, hasta el negro…”.

“Esta puntualidad en el lenguaje, esta exquisitez en el lenguaje…”, ha querido saber Carlos Sobera al escucharla hablar con tal precisión y con tan variado vocabulario. “Las palabras me gustan mucho, son mi juguete favorito”, ha asegurado Eva encantada de provocar reacciones con su forma de expresarse.

Nicolás, un tipo divertido y buena gente, se ha llevado una buena impresión al verla y mucho más cuando ha abierto el regalo que había traído para él. Fiel a su contacto con el mundo inglés, Eva le ha regalado una taza para que se tome el té.

Durante la cena, Nicolás ha querido saber un poquito más de Eva y se ha asombrado al saber a qué se dedicaba y como compaginaba su vida entre Inglaterra y España. Él le ha anunciado que su vida laboral no era tan apasionante, pero a ella le ha parecido interesante saber que se dedicaba al mundo de reciclaje.

Eva ha tenido claro que si coincidía en algo con Nicolás iba a ser en sus planes de futuro y él le ha confesado que lo que espera de la vida es enamorarse. Le gustaría vivir un momento de amor como el que vivieron John Lennon y Yoko Ono desnudos en la habitación de aquel hotel sin que le importe nada más que el amor que siente por su pareja. Eva no se ve de una forma tan exhibicionista, le gusta más el amor íntimo, pero también sueña con el amor en mayúsculas desde la A a la R.

Ni la boca que quería besar ni unas manos que le apetecía sentir

“Mi yo intelectual necesita mucha alimentación”, ha concluido Eva al escuchar a Nicolás hacer verdaderos esfuerzos para explicarle de forma culta los orígenes de su familia. Ella no quiere perder el tiempo que le queda y se ha dado cuenta de que no tenía delante ni la boca que quería besar ni unas manos que le apetecía sentir. Eva no quiere que Nicolás pierda ni un segundo del tiempo que necesita para encontrar el amor que está buscando y con muchísima elegancia le ha dicho que no volvería a quedar con él “Quiere dejar el tiempo y el espacio para que llegues a lo que deseas”.