Mónica no puede contener la risa al ver comer a su cita en ‘First Dates’: “¿Has visto la película de ‘Mira quién habla’?

  • Francisco le demuestra a Mónica su inglés de chiringuito: “Drinks and food”

  • Mónica pone a prueba a su cita: “¿Sabes comer con los ojos cerrados?

  • Ver ‘First Dates’ (31/01/23), online y completo en Cuatro

Clases de inglés, ataques de risa, películas históricas… La cita de Mónica y Francisco ha tenido de todo, menos el feeling que ella estaba buscando.

Francisco vende más de 30 todos los días y es boquerón de pura cepa, eso sí no le gustan nada esos pescaditos. Solo se los puede comer con limón y sin espinas. A Carlos Sobera le ha contado que su morenito es porque es de Málaga y que estado 18 años con pareja, y ahora lleva 9 separado.

Nadie le echa los 43 años que tiene, pero asegura tener una genética maravillosa. Ha tenido alguna noche loca, pero muy poquitas “te lo prometo”. Está buscando a una persona alegre, que le guste el cine y si puede estar morenita de piel.

Mónica, su cita, tiene una bola de cristal y consulta el más allá. Su abuela y su bisabuela tenían el poder de la videncia y ella lo ha heredado. Al entrar en ‘First Dates’ no ha tenido claro si le gustaba lo que estaba viendo, pero ella sí se ajustaba a lo que Francisco había pedido, estaba morenita y también es de Málaga. Los dos han brindado al saber que tenían más o menos la misma edad. Él a ella le ha parecido que estaba en el montoncito “no es guapo, pero tiene algo que a mí me ha gustado”.

Francisco y Mónica se han puesto ha hablar de sus vidas y han coincidido en todo, los dos son padres de dos hijos, de edades muy similares y son abuelos. Él estuvo con su mujer 18 años y ella cree que 22 porque a su marido siempre le salían 18 cuando echaba las cuentas. Respecto a lo que buscan en una relación, ella le ha dicho que una compañía, alguien con quien hablar y compartir…

El soltero le ha confesado que le apasiona el cine y que sus amigos le tachan de loco porque va solo, pero él no lo cree. Mónica hace mucho que no va al cine y él de broma le ha dicho que la última película que vio en el cine fue Titanic y ha acertado “escúchame, que fue esa”. Francisco no podía creerla, porque hace muchísimos años que se estrenó “eso tiene más años que un bosque”.

Clases de inglés con Francisco, un espetero de Málaga: "No good, no pay"

Sin conseguir romper la seriedad que dominaba la cita, Mónica le ha preguntado a su cita “la lengua, ¿cómo la dominas?” y al ver la cara de susto de Francisco, ha matizado “el idioma”. Él le ha seguido la broma “las dos lenguas bien” y le ha dicho que sabe hablar inglés. Ella ha insistido y el soltero le ha contado que se defiende para servir a los clientes en inglés. Al retarle a mantener una conversación allí mismo, Francisco le ha dicho respondido con un “Ouais" y Mónica le ha dicho que eso era francés y él ha bromeado con un “entonces hablo 3 idiomas”.

Metido de lleno en el juego del inglés y entre risas, Francisco le ha demostrado cómo consigue que todos los guiris que pasan por su restaurante después de elegir entre “drinks and food” se tomen un espetito típico de mala “no good no pay, si no te gusta no lo pagas”.

Mónica estaba observando como su cita se comía la tarta de queso y en un momento dado de que casi se le cae la comida, le ha entrado un ataque de risa brutal. A la soltera se le ha venido a la mente la imagen del niño dando de comer al abuelo de la película ‘Mira quién habla” y no podía dejar de reír “te vas a librar porque eres de Málaga”, le ha respondido él cuando ha conseguido tragar.

Sin dejar de reírse, le ha propuesto que probara a comer con los ojos cerrados y al malagueño no se le ha dado demasiado bien “te pareces al abuelo”. En el momento de la decisión final, Mónica le ha confesado a Francisco que se lo había pasado muy bien y que después de mucho tiempo se había vuelto a reír con un hombre “con mis amigas me rio todos los días”.

Él le ha dicho que también se lo había pasado muy bien y que le gustaría seguir conociéndola porque en una hora no se conoce a una persona y vivían muy cerca. Ella sin embargo, le ha dicho que no había sentido lo que esperaba y que le había gustado como persona, pero no como hombre para una segunda cita.