Adriano no entiende que su cita en ‘First Dates’ no vaya a playas nudistas: “¡Maricón, déjate llevar!"

Tras protagonizar una cita horrorosa, Adriano ha regresado a ‘First Dates’ en una second chance y no ha tenido mucha mejor suerte. Se lo ha pasado muy bien, se ha tronchado de la risa, pero no ha encontrado al motero tatuado y con rastas que buscaba para saltar las olas desnudo.

Jesús ha entrado en ‘First Dates’ con una bonita mariposa de cerámica entre las manos, siente pasión por las mariposas “tengo más de cien en mi casa” y se siente identificado con ellas porque le costó mucho trabajo mostrar al mundo su homosexualidad. Tiene dos hijos y cuando salió del armario sintió que era una mariposa abriendo las alas. Le atraen los hombres mayores que él y espera encontrar el amor en el restaurante.

Adriano, su cita, es un viejo conocido del programa que ha querido volver a probar suerte porque su primera cita en le restaurante fue “Horrible, nos dijimos de todo menos bonito”. Le rechazaron por su físico después de haberle besado y él prefirió ni hablar de lo mal que le sentó.

Antes de presentarle a su nueva cita, Carlos Sobera le ha enseñado la mariposa de Jesús y se ha quedado a cuadros. No era capaz de relacionar que una mariposa tuviera algo que ver con un hombre que ha salido tarde del armario porque solo estaba pensando en lo fea que era la mariposa. Al ver a Jesús, la cara de Adriano se ha convertido en un auténtico poema, no le ha gustado lo que ha visto y le ha chocado mucho su forma de vestir y que le hablara de su metamorfosis.

Jesús le ha contado a Adriano que vive en Nerja “¿Tú veías ‘Verano azul’?” y él se ha acordado inmediatamente de aquel momento “Chanquete ha muerto”. A Adriano no le importaría mudarse por amor y a Jesús le ha parecido bien. Han hablado de sus aficiones y Jesús le ha confesado que en el tema de las playas nudista todavía estaba dentro del armario, algo que su cita no ha entendido porque a él le encanta “Que venga la ola y te haga ‘prusa, prusa’, que te dé un meneo ahí abajo y ahí detrás que te vuelve loco, esas olas frías que se te recoge todo… ¡Maricón, déjate llevar! Que venga un tsunami y te vuelva loco, te dé tres volteretas”.

La cita estaba resultando agradable, pero en el momento que ha sabido que Adriano tenía solo 56 años, Jesús se ha echado para atrás “yo busco un abuelo de 75 o 80 años”. Metidos en el tema, el soltero le ha contado que había estado cuatro años casado con un hombre que tenía 84 años y que antes de morir le dijo que si él se iba que viniera al programa a buscar el amor “siempre lo veíamos juntos”. Al saber la edad de su marido, Adriano ha sentido que le gustaban los abuelos y él se lo ha explicado.

Jesús busca algo más que sexo en una relación y prefiere a los hombres mayores. “Yo no te gusto, te gustan los abuelos”, le ha respondido Adriano al saber sus gustos y que entre sus fantasías sexuales estaba tener sexo con dos hombres muy mayores “quieres tener sexo con dos abuelos de 90 años”.

Adriano y Jesús se han conocido de forma superficial porque ninguno de los dos ha mostrado interés en profundizar. Sin embargo, sí han querido saber qué se habían parecido antes de llegar a la decisión final. Jesús le ha explicado a Adriano que le estaba cayendo estupendamente, pero que su pelo no le terminaba de encajar, algo que él ha entendido “tu eres calva, ¿cómo no te va a gustar mi pelo? Es estupendo y todo natural”.

Él también ha sido sincero con él y le ha explicado que había pedido un motero tatuado y con rastas, todo lo contrario a él. Sin embargo, ambos se lo han pasado bien juntos, se han tratado con mucho respeto y no descartan tomarse una caña juntos si se vuelven a encontrar.