La abuela de Aitor, un niño víctima de homicidio imprudente por parte del hospital de Elda: ''Queremos que se les juzgue''

Aitor, un niño de tan solo ocho años, murió en octubre de 2020 a causa de una peritonitis en el hospital de Elda, Alicante. Había acudido al centro hasta cinco veces y no le realizaron ni una sola analítica para comprobar su estado de salud. Su abuela, Marta Gonzálvez ha luchado hasta el final para conseguir justicia para su nieto.

‘En boca de todos’ ha hablado con Marta, abuela de la víctima de la grave negligencia médica, quien nos cuenta todo sobre el homicidio imprudente que acabó con la vida del pequeño Aitor.

Con su incansable lucha, Marta ha conseguido que dos doctoras se sienten en el banquillo de los acusados: ‘’La verdad es que es un paso que estábamos deseosos de que llegara, pero queremos más, queremos que se les juzgue y pedimos un juzgado popular porque consideramos que ha habido una omisión de socorro también y pues ahí estamos luchando, esperamos que la audiencia provincial lo admita a trámite’’.

La abuela de la víctima explica qué le dijeron la primera vez que acudió al hospital con su nieto: ‘’Yo venía remitida por el ambulatorio de urgencias porque la chica le tomó la prueba del azúcar y vio que la tenía un poco elevada, a 137 para ser exactos. Nos subimos con el informe del médico de urgencias al hospital y allí nos dijeron que no, le hicieron un análisis de orina y nos dijeron que estaba todo bien, que eso tenía que ser debido a que el niño desde que había almorzado no había comido nada, pero que era una gastroenteritis aguda que remitiría en cuatro o cinco días’’.

Marta ha explicado que volvió a llevar a su nieto al hospital porque ‘’el niño se moría de dolor’’: ‘’Lo acerqué a su pediatra y la pediatra argumentó lo mismo, que era una gastroenteritis y que le diera suero, le dije que el niño no estaba bien, que no paraba de rabiar del dolor y me dijo: ‘si quieres que le den lo de los vómitos tienes que subir al hospital porque aquí ya no administramos nada’ y anda, otra vez para casa’’.

‘’Por la tarde lo volví a llevar al hospital porque no paraba de vomitar y ya me daba miedo (…) Me dijeron que por qué estaba ahí si ya me había dado un diagnóstico, digo ya, pero es que el niño no para, ya se mete hasta los dedos porque le calma. Y ahí me dijo con mucho despotismo: ‘Vamos a ver niño, te voy a dar esta medicación para calmarte los vómitos, si la piensas vomitar me lo dices y no te la doy. Y ya te hemos dicho que es una gastroenteritis en unos días se remite’. Ni una prueba ni nada’’.

Nacho Abad ha querido saber cómo le comunicaron el fallecimiento de Aitor: ‘’Yo cuando vine que le habían administrado la medicación cuando ya llamé a la UVI porque a mi hijo le dio el colapso se lo llevaron al hospital y cuando salieron me dijeron que no se había podido hacer nada, yo les pregunté que de qué, que como que no se había podido hacer nada y entonces me dijeron que le habían visto una perforación, que había fallecido de una peritonitis. Digo, pero si mi hijo tiene una gastroenteritis, ¿Qué me está diciendo usted que lo han matado aquí?’’, Marta ha dicho que la doctora le respondió que sí a su pregunta afirmando con la cabeza.