El "complicado caso" de Escalante: los dos miembros de la pareja tenían heridas de arma blanca

  • La policía científica ha regresado al domicilio conyugal para ampliar la investigación

  • No existían denuncias previas por violencia de género

La policía científica ha concluído este martes un segundo análisis del domicilio donde vivián Maruchi y Juan en el municipio cántabro de Escalante. La presencia de los especialistas ha durado dos horas por la necesidad de recabar más pruebas en un caso que el delegado del gobierno en Cantabria, ha calificado de "muy complicado" ya que la mujer fue hallada muerta en el domicilio conyugal cuando los agentes se personaron en la vivienda para comunicarle el fallecimiento de su marido en un accidente de tráfico. Los dos tenían heridas por arma blanca.

Eduardo Echevarría, representante del Ejecutivo en la región ha declarado que por el momento no han trascendido más datos sobre el suceso que los que ya se conocen, dado que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Santoña, que se ha hecho cargo del caso, ha decretado secreto de sumario.

Según ha dicho, se trata de un asunto que "pude ser muy complicado" y del que sólo se conocen los hechos que se encadenaron a última hora de la tarde de ayer, con el fallecimiento en accidente de tráfico del marido, que se salió de la vía y chocó contra un árbol y el posterior hallazgo del cuerpo de su mujer en el domicilio familiar.

Fue entonces, al encontrar a la fallecida con heridas de arma blanca, que también se comprobó que presentaba su marido al levantar el cadáver, cuando empezó a investigarse como un posible caso de violencia de género.

El delegado ha trasladado sus condolencias tanto al alcalde como a los hijos y la familia de los fallecidos, "independientemente de cómo hayan sucedido los hechos", ha apostillado, ya que "su hijo y su hija y sus familiares" son "los más afectados en este momento".

Ha indicado que la investigación seguirá su curso, a través de los datos que recabe la Guardia Civil y de las autopsias de los fallecidos, y será la jueza la que "administrará" la información de la forma que considere "más conveniente". "Hasta que no se levante el secreto de sumario no habrá más datos", ha recalcado.

No obstante, ha reconocido que la principal hipótesis es que el marido acabó con la vida de ella, pero "no se descarta absolutamente nada". Ha añadido que "todo apunta" a que el suceso tiene que ver con la "relación interna" de un matrimonio, pero se desconocen las causas que pudieron desencadenarlo, ha dicho.

Aunque Echevarría ha asegurado que "no podemos saber si es a causa de violencia doméstica, de género o cualquier otro supuesto que se haya podido dar en domicilio familiar", desde la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género si se ha confirmado como asesinato machista este crimen. El representante del Ejecutivo ha confirmado que no existían denuncias previas por malos tratos por parte de ningún miembro de la familia.

Tampoco se conocen detalles de cómo se encontraron el domicilio los agentes de la Guardia Civil que acudieron a notificar a la mujer la muerte de su marido en accidente, y si estaba abierta o no la puerta. Sólo ha trascendido que ésta apareció junto a un charco de sangre y con heridas por arma blanca.

El alcalde de Escalante ha incidido también en que hasta que no se conozcan los detalles de lo ocurrido, el Ayuntamiento no va a convocar ningún tipo de acto. "Vamos a esperar a que la investigación siga su curso y cuando tengamos mas datos, decidiremos como ayuntamiento las medidas a tomar", ha señalado.

Hechos

El accidente en el que falleció el marido se produjo ayer a las 17.40 horas tras colisionar con su vehículo contra un árbol en el kilómetro 0,8 de la CA-460.

Al ir los agentes de la Guardia Civil a comunicar su fallecimiento al domicilio familiar, encontraron el cuerpo de la mujer, que presentaba varias heridas de arma blanca, junto a un charco de sangre.

El cuerpo del hombre fallecido en el accidente también presentaba heridas de arma blanca, tal y como se comprobó al proceder al levantamiento del cadáver.