"Me alegro de que le hayan apartado de los niños": la reacción de Pepe Godoy, tras su denuncia sexual
La asociación Baskonia Futbol Eskola no lo dudó un instante. Tras la grave denuncia de Pepe Godoy, un vecino de Basauri contra el que era su entrenador de fútbol al que acusaba de abusos sexuales después de décadas de silencio, el hombre ha sido expulsado de una asociación en al que todavía entrenaba en categorías infantiles. Aunque todos los delitos están prescritos, Godoy decidió hablar como apoyo a esta causa a sus 46 años.
Su mujer, que tampoco sabía nada de los hechos le empujó a hacerlo para proteger a los pequeños que aún estaban en su clase. La escuela, según han publicado los medios vascos, “ha rescindido la colaboración con el denunciado, e informado debidamente de su decisión a los padres”. Estos consideran que si los hechos (la denuncia ha sido archivada porque ha prescrito) son ciertos se trata de algo terrible y ante la duda consideran que lo mejor es apartar al entrenador de su puesto.
“Mi agresor se ganó la confianza de mi familia, abusó de mi de manera continua y en innumerables ocasiones de los 8 a las 11 años. Tras 36 años de vergüenza, dolor y miedo en la soledad pude contárselo a mi mujer”. Tras esta confesión la mujer de Pepe se puso en contacto con la Ertainza para informar del suceso ocurrido hace tres décadas. El delito ha prescrito pero Pepe asegura que “sé que mi dolor no prescribirá nunca. Vivir con esto es muy difícil. Mi agresor sigue entrenando a niños”.
El vídeo de la denuncia de Pepe ha sido publicado por la asociación Garaitza, que se dedica en Bilbao a atender a personas que han sufrido abusos sexuales y maltrato en su infancia. Precisamente y para matizar, la Sociedad Deportiva Ariz emitió ayer un comunicado en el que negó rotundamente que la presunta agresión hubiera tenido lugar en alguno de sus equipos. El propio Pepe Godoy aclaró que él jugaba en el Ariz, cuando el supuesto abusador entrenaba en el equipo del colegio Calderón de la Barca. "Me conoció en una lonja de Basauri y ahí empezaron los abusos, me llevó al Basconia donde siguió abusando de mí, pero él jamás me entrenó. Yo dependía de otro técnico", aclara Godoy, que hoy siente que su denuncia ha merecido la pena.
