Pablo Hasél habla un día antes de entrar en prisión: “No voy a entrar en la cárcel de forma voluntaria”

  • El rapero esperará a que se dicte para él la busca y captura: "Van a tener que venir a secuestrarme"

El rapero Pablo Hasél ha sido condenado a 9 meses de cárcel por injurias a la corona y enaltecimiento del terrorismo en sus tuits y en algunas letras de sus canciones. Tiene hasta mañana para ingresar en la cárcel de forma voluntaria - cosa que ha declarado ya que no va a hacer- y ‘Cuatro al día’ ha hablado con él en directo en su último día en libertad.

Lo primero que ha dicho el rapero es que no va a ir “a llamar a las puertas de la cárcel” para llevar a cabo “una condena tan injusta” como la suya: “Si quieren encarcelarme, tendrán que venir a secuestrarme. Yo mañana voy a estar en mi casa haciendo vida norma, ya saben lo que voy a hacer y dónde encontrarme”.

Esta misma semana, al conocer la condena, Joaquín Prat se leyó los 68 tuits por los que ha sido condenado y, de ellos, dijo lo siguiente: “Yo me he leído los tuits estoy de acuerdo con algunos, con otros no y hay otros que me han hecho hasta gracia. Pero que nosotros podamos leer o cantar las canciones de Pablo Hasél sin tener ningún problema jurídico y él vaya a entrar en la cárcel, me parece un escándalo”.

El mismo argumento se lo ha dado al propio Hasél, quien ha contestado que en España “no existe la libertad de expresión” y que su caso es un ejemplo de ello. “Yo no voy a permitir que nadie me diga qué es lo que tengo que vestir, que pensar o que decir. Tampoco a quién tengo que admirar”, ha dicho, haciendo alusión a los etarras, a quien ellos llama “presos políticos”, que ejercieron su autodefensa frente al Estado del terror y a los que considera como un “ejemplo de resistencia”.

El propio presentador (y otros miembros de la mesa) no ha estado de acuerdo con estas últimas declaraciones, pero ha lanzado la pregunta que se hacen todos los defensores del rapero: “¿Hay que meterle en la cárcel por esto?”. Cristina Fallarás ha recordado, entonces, que hay fundaciones franquistas que también enaltecen la figura de un dictador.