El Chicle usó una brida y lastró el cuerpo de Diana con ladrillos de hormigón
Tras horas de un durísimo interrogatorio, el Chicle confiesa dónde está el cuerpo de Diana. Conduce a los agentes a una antigua fábrica de gaseosa ahora abandonada, a 200 metros de la casa de sus padres. En ese lugar, una propiedad privada en venta, arrojó hace 16 meses el cuerpo de la joven. La tiró al interior de un depósito de agua potable. Un cilindro de 10 metros de profundidad a ras de suelo. Enseguida el perro de la Guardia Civil percibe el olor a restos biológicos. Con una cámara submarina ven perfectamente el cadáver de la madrileña a 8 metros. Está bien conservado porque el agua es limpia, no hay fauna que pueda estropearlo y la temperatura es fría y constante. Dentro del depósito encuentran también un bolso y una brida de plastico, que pudo ser usada por el detenido para maniatarla o para estrangularla.