Trump busca al traidor: "Hemos secado el pantano, ganaremos"

cuatro.com 07/09/2018 13:53

Fuego, decía Wolff en su libro vetado por Trump y que el presidente intentó que no se publicara. Y furia. Ambas cosas dominan hoy en la Casa Blanca en la que el presidente está en llamas, irritado, buscando un traidor. Así que el libro de Woodward, un grande hace unos días y ahora un nuevo enemigo para el presidente y su título, Miedo, vuelve a tener vigencia. Ahora el mítico periodista es un fraude, un timo, una invención. Es lo que se siente en los despachos cercano al Despacho Oval. Miedo. Porque Trump está a la caza del traidor. Y tiene muchos nombres en su lista... hasta su mujer, por cierto, aunque esta haya salido rauda a defenderle.

El detonante no ha sido solo el libro del mítico periodista del Watergate. El gran leviatán para Trump, el New York Times, ha publicado un anónimo que desvela que parte del equipo presidencial trabaja contra el presidente. Le oculta información y le quita documentos para que no pueda llevarse por sus impulsos. Y estas acciones están en el círculo de confianza de un presidente ya de por sí desconfiado al máximo y que más que la capacidad valora la lealtad.

La columna sin firma del miércoles generó que al menos 11 asesores de Trump, incluyendo al vicepresidente Mike Pence, el embajador en Rusia Jon Huntsman, el secretario de Estado Mike Pompeo y el secretario de Defensa James Mattis desmintieran ser los autores. El presidente mostró un enfado evidente tras publicarse el artículo y lo definió como un ataque de sus críticos para negar sus éxitos, mientras la intensa especulación sobre quién escribió la columna consumía a Washington. La primera dama, Melania Trump, aseguró en Twitter: “Para el autor de la columna de opinión: no estás protegiendo este país, lo estás saboteando con tus acciones cobardes”.

La carta es muy dura porque desvela también que este círculo pensó seriamente actuar para incapacitar al presidente pero pensaron que el beneficio sería peor que la crisis institucional que podría provocar. Así que en la sombra, intentan que los daños colaterales de Trump sean los mínimos. También reconoce el anónimo algunos aciertos del gabinete, pero el presidente dice que ya está secando el pantano, en un símil de que el cerco se está estrechando y que va a devolver el golpe.

Un ex funcionario de la Casa Blanca ha definido a la perfección la situación a The Washington Post: "Es como las películas de terror cuando todo el mundo se da cuenta de que la llamada viene del interior de la casa". "El problema para el presidente es que podría ser tanta gente", ha dicho un funcionario actual de la administración. "No se puede descartar a una persona".