Se trata de la cuarta víctima mortal del tiroteo ocurrido en un instituto de la localidad de Marysville, a unos 35 kilómetros al norte de Seattle (en el estado de Washington) y perpetrado por el adolescente Jaylen Fryberg, que se suicidó después de cometer los asesinatos.
En el día del ataque fallecieron dos personas, el autor de los disparos y Zoe Galasso, de 14 años de edad. Varios días más tarde fallecía en el hospital otra niña de la misma edad, Gia Soriano, que recibió un disparo en el tiroteo y permanecía en estado muy grave.
Hace justo una semana fallecía también Shaylee Chuckulnaskit, que permaneció en el hospital desde el suceso a causa de las heridas de bala. Otro estudiante -Nate Hatch, de 14 años- recibió un disparo en la mandíbula, pero pudo ser dado de alta finalmente tras someterse a varias operaciones, según informa el diario estadounidense 'USA Today'.
Varios testigos relataron como Fryberg, considerado un chico popular y extrovertido, entró en la cafetería del instituto y disparó a un grupo de jóvenes que estaban sentados en una mesa, entre los que se encontraban dos de sus primos, su ex novia y varios amigos, antes de quitarse la vida.