Aldo Linares ha recorrido la casa en la que el equipo de 'Cuarto Milenio' realizaba el experimento de aislamiento para comprobar si efectivamente presencias paranormales conviven con sus habitantes. El sensitivo no habló en ningún momento con la propietaria del inmueble, estaba completamente a ciegas: "Me viene la sensación de un hombre mayor, con la espalda ancha y el pelo blanco". El marido de la propietaria de la vivienda falleció años atrás.