Callejeros: Camino de Santiago

AS.COM/CUATRO 28/07/2010 11:46

Desde el año 813, millones de personas de todo el mundo han peregrinado a Compostela. Recorren cientos de kilómetros a caballo, a pie o en bicicleta, para abrazar la imagen del Apóstol Santiago y dar tres cabezazos en el Pórtico de la Gloria.

En la Plaza del Obradoiro acaban todos los caminos: el primitivo, el francés, el portugués... aunque muchos continúan hasta el antiguo fin del mundo, Finisterre, igual que hace mil años, para quemar la ropa, "todo lo malo del camino y volver a casa", explica Manolo, que acaba de superar un cáncer.

Callejeros recorre casi 900 kilómetros de camino desde Roncesvalles, en los Pirineos. Hospitaleros de siempre ofrecen al peregrino comida, bebida y un lugar donde pasar la noche acompañado de decenas de personas. "Todos roncan" avisa Jesús, mientras invoca a las meigas gallegas junto al fuego. Tomás, el Templario, les recibe con espadas; Marcelino, el de la locura, con un puñado de cerezas "gratis, porque el camino se ha prostituido" y Pablito, el Varas, les enseña a caminar a pesar de las ampollas y las quemaduras que sufren la mayoría.

Ya en Santiago todos lloran, comprueba Juan Carlos, el Zapatones: acaba el Camino a Santiago pero empieza el verdadero camino.