Análisis de Super Monkey Ball Banana Mania: ¡caña al mono!

La saga Super Monkey Ball ha sido una de las más características de Sega desde el inicio de la década de los 2000. Una saga de juegos de plataformas y puzles que cautivó a muchos usuarios hace dos décadas y que contaba con una manada de personajes que se han vuelto muy carismáticos para la compañía nipona. Y es que esta familia de monos encerrados en bolas de ‘máquinas gatcha’, como si de un premio se trataran, se han colado entre los personajes más conocidos de Sega y han participado en muchos otros juegos junto a Sonic y compañía.

Para los que hayan vivido en otro universo estos últimos 20 años, hay que explicar que Super Monkey Ball es un juego de puzles y plataformas que exige mucha precisión y en el que nuestro personaje, un simpático mono, está encerrado en una bola y debe atravesar, rodando con ella, distintos niveles. Estos pueden ser plataformas, rampas, loopings y superficies de todo pelo, pero todos cuentan al final con una meta por la que tenemos que conseguir pasar la bola para completar el nivel. Pero la peculiaridad más grande del juego es que nosotros, con nuestro mando de control en las manos, no controlamos la bola, sino la inclinación de los escenarios. El control preciso de la gravedad será lo que nos lleve a la victoria en cada endiablada fase. El tiempo en conseguirlo y la cantidad de bananas recogidas aumentará tu puntuación.

Es cierto que las entregas de Super Monkey Ball de los últimos años no han despertado el entusiasmo de los fans, pero la celebración del 20 aniversario de la franquicia requería de un titulo a la altura. Y Sega ha decidido realizar un fabuloso recopilatorio de las tres primeras entregas, remasterizarlas y dejarlas bonitas para las nuevas consolas, y lanzar un juego que recopila toda la magia de la saga aquellos primeros años y que comenzó en una popular recreativa. Así, aquí encontramos todos los niveles de Super Monkey Ball, Super Monkey Ball 2 y Super Monkey Ball Deluxe (este último ya era una especie de recopilación de los dos primeros), además de algunos otros extras.

Esta acertada recopilación nos pone en bandeja más de 300 niveles para disfrutar de la jugabilidad endiablada de Super Monkey Ball, y tenemos que decir que son niveles que no han envejecido nada mal. El modo para un jugador nos tiene reservadas horas para aburrir si queremos completarlo, tanto el modo historia como los modos desafíos de los dos primeros juegos, además de un nuevo modo especial y los modos práctica, y nos permite disfrutar de unas nuevas secuencias, realizadas en estilo cómic, entre fase y fase.

La jugabilidad es la de siempre y su dificultad creciente y que siempre añade una nueva vuelta de tuerca a los niveles. El juego nos permite enfrentarnos al desafío de cada nivel como lo hacíamos hace 20 años o recibiendo una ayudita para quién lo necesite. El juego siempre se adapta para que haya un equilibrio entre el desafío y la diversión, pensando en todo tipo de jugadores (en edad y en habilidad).

Además de este modo principal hay un modo Mini Juegos que es una auténtica delicia. Se trata de 12 juegos de lo más divertidos, un auténtico modo fiesta que permite hasta cuatro monos controlados por cuatro mandos en modo local. Para jugar con amigos y, sobre todo, con pequeños en casa, este es el modo que más horas te va a consumir: un modo carreras al más puro estilo Mario Kart, un modo billar, unos bolos, un juego de golf, peleas, fútbol o béisbol… Una colección de mini juegos descacharrantes donde las bolas con monos dentro son capaces de servir para todo. Una pena que no hay modo online para estos mini juegos.

Eso sí, hay un modo desafíos en el que puedes subir a Internet tu puntuación y compararla con el resto de jugadores del planeta.

Además de la enorme cantidad de niveles, modos desafíos, modos especiales y el ingente modo historia, esta recopilación es especial y por eso sega ha querido vestirla con aspecto de celebración. Para ello hay cientos de extras divertidos y que son un guiño para todos los fans de la saga protagonizada por estos simpáticos primates y para todos los fans de Sega en general.

Así, lo más vistoso es la gran cantidad de cameos que hacen aquí los personajes y los9 objetos de otras muchas sagas de Sega, como Sonic, Yakuza, Jet Set Radio y más. Puedes elegir a muchos de sus personajes para que sean los protagonistas dentro de las bolas, así como cambiar las bananas por objetos más acordes a ellos (como los anillos en el caso de Sonic).

Y junto a estos extras hay que incluir la inmensa variedad de personalizaciones que puedes añadir a todos los personajes: aspectos, trajes, objetos, bolas de mil diseños. La personalización es uno de los puntos más fuertes del juego.

Ha tenido que llegar un aniversario para que Sega se pusiera las pilas con la saga Super Monkey Ball. Esta recopilación es todo lo que un verdadero fan de la serie de monos encerrados en bolas de plástico podría desear. La mejor recopilación de niveles, adaptados y mejorados para su disfrute en los nuevos tiempos y con las nuevas consolas. Un montón de modos, niveles y minijuegos para disfrutar solo y acompañado y, de postre, personalización y extras para derramar lágrimas de nostalgia ‘seguera’.