Análisis Windbound; aventuras y supervivencia en medio del mar

  • Analizamos esta nueva IP indie creada por 5 Lives Studios y Deep Silver, ya disponible en PC, PS4, Xbox One, Nintendo Switch y Google Stadia

  • Una obra de aventuras, supervivencia y exploración con toques de rogue-like y un apartado artístico distintivo

Windbound es una nueva propiedad intelectual creada por el estudio australiano 5 Lives Studios y publicada por Deep Silver que nos propone una aventura en pleno mar donde encarnamos a Kara, una misteriosa joven que debe construir, explorar y avanzar para desentrañar los misterios que ocultan las Islas Prohibidas. La propuesta mezcla varios géneros como el de la supervivencia y el rogue-like para obtener una mezcla atrayente que, si bien no es perfecta, sí resulta interesante y distintiva.

Os lo contamos todo paso a paso a continuación como parte de este análisis de Windbound, el cual ya está disponible a precio reducido en PC (Epic Games y Steam) y consolas PS4, Xbox One y Nintendo Switch, además de en Google Stadia.

La historia de Kara y las Islas Prohibidas

“Para la tribu de Kara, las hazañas de sus antepasados son legendarias. Los cazadores, pescadores, guerreros, poetas y filósofos, sus historias hablan de un pueblo que vivía en perfecta armonía con el mundo natural y que nadaba en las profundas aguas en compañía de los dioses. Aunque la historia de su caída se ha perdido en el tiempo, su legado vive en varios artefactos que han perdurado hasta hoy”.

Sumergiéndose poco a poco en un oscuro mar embravecido, Kara pierde la conciencia mientras recuerda cómo una tormenta la separó de su tribu y no pudo hacer nada para evitar caer al agua y perder su barco. A pesar de que todo parezca perdido, cuando abre los ojos se encuentra en un lugar misterioso y mágico, en el que la espera un amplio y luminoso portal. Tras cruzarlo, despierta en la orilla de una isla con los rayos de sol acariciándole la piel.

A partir de este momento empieza el primero de los seis capítulos que componen esta aventura. Disponemos de pocas indicaciones en un inicio, por lo que explorar la primera isla en la que nos encontramos y recoger materiales para construir un barco sencillo será nuestra primera misión. Una vez que consigamos un remo podremos partir en busca de respuestas y descubrir las Islas Prohibidas, una serie de localizaciones en las que nos espera una mezcla de elementos naturales y mágicos junto a la promesa de que conseguiremos encontrar algo más que el camino de vuelta a casa.

Exploración, crafteo, navegación y combate

Como podéis adivinar, la exploración es un elemento clave en Windbound. Sobre todo en los primeros compases de la aventura, donde todo supone una novedad, cada isla que se asoma en el horizonte, haz de luz que se eleva en el cielo o antiguas ruinas que descubramos despertarán nuestra atención. Cabe señalar que cuando llevemos unas cuantas horas de juego comprobaremos cómo hay muchas islas similares las unas con las otras. Por tal motivo, y debido a que el tiempo de juego total se puede extender perfectamente entre las 7-8 horas, habrá momentos en los que sintamos una cierta sensación de hastío y repetición al explorar.

Sin embargo, no podemos decir que las islas estén vacías y sin contenido, ya que en prácticamente todas ellas nos espera un misterio por descubrir, animales salvajes para cazar y materiales para construir. En cuanto a esta vertiente más de supervivencia, podemos decir que el sistema de crafteo y el menú en el que se encuentra resulta un tanto caótico e impreciso en un inicio, pero que a medida que nos acostumbremos a él agilizaremos el proceso de creación de elementos como lanzas, arcos, cuerdas y más herramientas útiles.

El barco velero es otro de los pilares de Windbound. Más allá de nuestro método de transporte será también nuestro compañero inanimado de aventuras, ya que desde que lo construyamos nos acompañará de isla en isla y podremos repararlo y mejorarlo con tal de añadirle velas resistentes, una superficie más amplia y otros detalles que ayudarán a que aguante mejor las travesías por el mar.

El punto de rogue-like le viene tan solo si escogemos la opción “Superviviente” en lugar de la de historia al empezar el juego. En este modo de dificultad elevada, cuando muramos volveremos al capítulo 1, tan solo conservaremos los objetos de los espacios “sostenidos” del inventario y el nivel de desafío global será más elevado. Por ello, la experiencia de Windbound puede cambiar en gran medida en función de su optamos por esta opción o bien por la de “Historia”, dónde no hay prácticamente ninguna penalización por morir.

Si bien echamos en falta encontrarnos con algún NPC humano, algo que habría dotado de una capa adicional de complejidad a la propuesta, entendemos que presente el aspecto actual de cara a rodear de misticismo el argumento del título, además de transmitirnos una sensación de soledad e incrementar así los peligros que rodean a Kara. En cuanto a estos, a medida que avancemos en la historia nos encontraremos con seres marinos gigantescos que funcionarán a modo de bosses, además de otras amenazas más pequeñas que podremos eliminar con ayuda de nuestro ingenio y armas recién crafteadas.

El sistema de control, en general, es bastante satisfactorio pero hay tramos en los que navegar se puede hacer un tanto tedioso, ya que nos pasaremos bastante tiempo manejando el barco en alta mar. En cuanto a Kara en sí, no se trata de una súper-heroína, por lo que debemos medir cada salto y las distancias con tal de no perder vida al caer de un saliente rocoso, por ejemplo. Todo ello va ligado directamente con el espíritu aventurero y de supervivencia de la experiencia, algo que sentiremos de principio a fin.

Apartado gráfico, técnico y sonoro

El apartado gráfico y artístico de Windbound es llamativo, colorido y distintivo. Tanto el diseño de la protagonista como del mundo que visita están creados con mimo y eso es algo que desprende cada uno de sus píxeles. Esto hace que explorar y navegar se convierta en una bonita experiencia, ya que podremos realizar todas las capturas que deseemos para crear un álbum con todas las aventuras que vivamos por las Islas Prohibidas.

Eso sí, es en su apartado técnico donde hemos encontrado algún que otro error y bug menor como popping de texturas o problemas de colisiones, así como unas pantallas de carga bastante extensas. Esto queda un tanto compensado por un apartado sonoro remarcable. Presenta una BSO compuesta por temas repletos de magia que se adaptan al ritmo de cada tipo de situación y hacen que las travesías por alta mar no sean tan monótonas, además de aportar un toque de misticismo a los descubrimientos que realicemos junto a Kara.

En definitiva…

Windbound nos permite vivir una aventura en pleno mar junto a Kara, una joven que tiene como misión el reunirse con su tribu tras el naufragio que los separó. Para ayudarla en dicha tarea, tendremos que aprender a sobrevivir gracias a elementos como la exploración, el crafteo, la caza y la navegación con tal de desentrañar el misterio que se esconde en las Islas Prohibidas. Partiendo de esta intrigante premisa, descubriremos una jugabilidad que no se siente del todo fina a los mandos pero que aun así es satisfactoria en líneas generales.

Acompañada por un apartado artístico distintivo y llamativo y de buena una banda sonora, la propuesta de 5 Lives Studios cumple con creces su promesa y nos invita a descubrir una obra sencilla a la par que bonita e interesante.

Hemos realizado este análisis gracias a una copia de PS4 proporcionada por Koch Media