Uno de los periodistas que ha sufrido la soledad de ir contracorriente, es Rubén Sánchez, Periodista y Portavoz de ‘FACUA’, y la persona que denunció una de las cloacas de España, la de la Asociación de Usuarios de la Banca, más conocida como Ausbanc. Su líder, Luis Pineda, se dedicaba presuntamente a la extorsión, amenazando con publicar en sus revistas informaciones negativas de las empresas si no accedían a insertar publicidad en sus revistas. “Según pone de manifiesto el sumario del caso Ausbanc y Manos limpias, muchas de esas empresas lo hacen fruto de la extorsión, fruto de mensajes desde Ausbanc planteando o nos pagas, a través de publicidad en nuestros medios o te pondremos en marcha campañas de difamación”, explica Rubén Sánchez sobre lo que Carlos Enrique Bayo califica de “el periodismo de la pistola encima de la mesa”.
Las campañas de Ausbanc no hubieran tenido ningún tipo de efecto sin los medios de comunicación tradicionales. Televisiones, radios y periódicos, les encumbraron como los legítimos representantes de los usuarios de la banca. En la mayoría de casos, eso ocurrió por desconocimiento pero otras veces, Luis Pineda habría comprado a periodistas según asegura Sánchez: “Pineda compró a periodistas y también le pagó a un alto cargo de Canal Sur Televisión para poder tener notoriedad en los informativos de la televisión pública. O incluso, logra vender un programa propio lleno de publicidad encubierta y en paralelo le paga al número 3, a Antonio Ramírez, jefe de programas… La paga dinero a través de facturas”.
Luis Pineda tiene la repercusión de sus demandas asegurada y además, tiene dos medios de comunicación que habría usado a su antojo: la revista de Ausbanc y la de Mercado de dinero, una publicación económica mensual de su propiedad. Desde sus páginas habría disparado a entidades como Caja Madrid, en ese momento presidida por Miguel Blesa. Según Rubén Arranz Blesa dijo que “a Luis Pineda ni un euro”, pero que “cuando llegó Rodrigo Rato eso cambió y volvió a contratar la publicidad de Ausbanc”.
Habrá otras empresas que se nieguen a pagar desde un principio y que lo paguen caro en su imagen pública. Es el caso de Credit Services. Una empresa a la que Luis Pineda habría pedido 300.000€ por no publicar informaciones perjudiciales, según afirma su director Javier López. Esto ocurre en 2006, pero la denuncia es archivada y el denunciante condenado por haber llamado “extorsionador” a Pineda. Ocho años después, Rubén Sánchez publicaba esta información en eldiario.es: “La verdad sobre el negocio de Ausbanc y el pasado ultraderechista de su presidente, Luis Pineda”, dónde no solo explicaba con detalle el modus operandi que utilizaba Pineda para extorsionar sino que también destapaba que había pertenecido al grupo de extrema derecha Frente de la Juventud, por el que había sido detenido y juzgado apenas dos años de fundar Ausbanc.
Tras esta publicación, Rubén Sánchez asegura que Pineda empieza a obsesionarse con él “me asocia a la emisión de facturas falsas, dice que he cobrado de la trama de los ERES, plantea que soy un pedófilo… Llegó a publicar que me dedicaba a acosar en Twitter a Marta Flich… Pineda estaba absolutamente obsesionado conmigo, en pocos años le llego a contar más de 700 tuits desde su cuenta personal lanzados para desarrollar sus campañas de difamación contra FACUA y contra mí”.
La campaña de acoso en redes no funciona y por eso Pineda decide aumentar la presión en Sánchez y lo hace inundando Sevilla con marquesinas con la imagen del Portavoz de FACUA, al que presenta como un corrupto. El 15 de abril de 2016, Luis Pineda, el Presidente de Ausbanc es detenido. La primera condena que tendrá que pagar Pineda en prisión es por difamar a Rubén Sánchez. Por primera vez en la historia de España se deberá habilitar una sala en la cárcel con internet y un ordenador para que pueda cumplir su condena “Tuitear 30 veces durante 30 días la sentencia que le condena”.
Luis Pineda ya no puede dirigir campañas, aunque está en libertad desde el mes de abril, después de pagar una fianza de 200.000€.