El férreo control del gobierno chino a su población: pájaros robot y carnet de puntos para ciudadanos

  • Entrevistamos al coronel y experto geopolítico, Pedro Baños

  • Se estima que China puede tener más de 250 millones de cámaras de vigilancia

  • El funcionamiento del carnet ciudadano: "A lo mejor, los hijos no pueden ir a la universidad porque el padre tiene pocos puntos"

Tras la muerte del médico que alertó sobre el coronavirus, el gobierno chino ha censurado todas las redes sociales donde se estaban manifestando de manera masiva “muchísimos ciudadanos” en solidaridad con el fallecido. Por eso, ‘Todo es mentira’ ha pedido al coronel y experto geopolítico, Pedro Baños, que nos resuelva la gran pregunta ¿Cómo es el control del gobierno chino a su población?

El entrevistado nos ha hablado que utilizan instrumentos como cámaras de vigilancia, que tienen desplegadas por todo el territorio: “Se estima que puede tener más de 250 millones de cámaras de vigilancia. Hay ciudades enteras donde hay una cámara por cada cinco o seis ciudadanos”. Además, nos cuenta que estas cámaras cuentan con un sistema de reconocimiento facial “realmente avanzado” que permite reconocer a cada uno de los ciudadanos con un 100% de fiabilidad: “Saben exactamente lo que están haciendo y si están cometiendo cualquier acto contrario a las normas de ciudadanía”.

Pero eso no es todo. Según el coronel, también existen “pájaros robot”, que serían drones especiales con una cámara de vigilancia “muy sensible” y con conexión a Intenet: “Pasan los datos en tiempo real”.

El entrevistado ha explicado también que China es “un país disciplinado” y que todo el mundo tiene la obligación de acatar, “de inmediato”, las normas que impone el gobierno: “Cualquier persona que ahora, por ejemplo, no lleve la máscara es inmediatamente detectada y castigada por ello”.

Una forma de llevar a cabo estos castigos es mediante los puntos que tiene cada habitante, “una especia de carnet ciudadano” que se utiliza para sancionar a quienes, por ejemplo, se salten un semáforo en rojo, monten jaleo en el tren o no paguen sus deudas a tiempo: “Se les van descontando puntos con grandes consecuencias para esta perdona y para su familia. A lo mejor, los hijos no pueden ir a la universidad porque el padre tiene pocos puntos ciudadanos”.

Por último, Pedro Baños aclara que, tanto el Internet como la mensajería instantánea, pueden ser censuradas por el gobierno y que, de hecho, esta es una práctica muy habitual: “El control que existe sobre la población es tremendamente férreo en todos los sentidos”, asevera en nuestro programa.