Las calles de Sant Llorens, Mallorca, están intransitables. Se acumulan coches, escombros y basuras que ha arrastrado el agua esta noche tras el desbordamiento de un torrente. La localidad balear es un auténtico lodazal. Las viviendas tampoco se han librado de la fuerza del agua, que ha arrasado con todo lo que se ha encontrado a su paso. Los equipos de emergencia llevan toda la noche trabajando sin descanso. Cinco personas han muerto y varias permanecen desaparecidas.