El objetivo es recuperar la atención en las clases y promover la socialización entre alumnos en los recresos
Los colegios dan marcha atrás con las pantallas: Cataluña prohíbe móviles en horario lectivo y el uso del ordenador será limitado
BilbaoUn colegio de Euskadi ha puesto en marcha un sistema pionero para limitar el uso del móvil en las aulas. Se trata de una funda semirrígida donde los alumnos introducen su móvil en cuanto entran al centro y que queda sellada todo el día. Los estuches solo pueden abrirse al finalizar las clases, informan en el vídeo Maialen Larrinaga y Estíbaliz Galdós.
La medida va de la mano de la intensa corriente que se está dando en todo el panorama educativo español: poner coto a las pantallas. El principal objetivo es recuperar la capacidad de atención de los alumnos, además de fomentar una correcta y sana socialización entre los niños.
La funda se sella a primera hora y solo permite ver la hora
"Según llego al cole lo apago, lo meto en la funda y en la mochila", afirma Daniela, estudiante de segundo de la ESO. Desde que entran al colegio, los alumnos de Secundaria y Bachillerato que traen consigo el teléfono saben que este curso hay nuevas normas. El centro vizcaíno Claret Askartza ha aprobado una iniciativa pionera.
"Es un sistema super sencillo", asegura Nagore Bilbao, la directora. "Cogen la funda, una funda de neopreno semirrígida, donde meten el dispositivo digital y el reloj digital si lo tienen. Le dan al botón, lo sellan y queda absolutamente cerrado", explica. Posteriormente, los alumnos llegan al aula y el tutor puede pedirles comprobar que, efectivamente, el estuche está sellado.
Más atender en clase y más jugar en el recreo
El cierre de seguridad queda bloqueado durante todo el horario escolar. "Y es imposible de abrir", apunta Daniela. Con el timbre de fin de clases se habilitan automáticamente varios puntos para que los alumnos puedan, con solo un click, desbloquear la funda y acceder a su móvil. "Tenemos 12 puntos fijos y luego puntos móviles por si alguien tiene que abandonar antes el colegio", añade la directora.
El objetivo de esta medida es evitar las distracciones y mejorar la capacidad de concentración. Incluso los propios alumnos saben que últimamente el móvil es un gran ladrón de atención. "Hay gente que saca el móvil en medio de clase y no lo veo bien", afirma Urko, alumna de segundo de la ESO. No solo se centran de manera plena en las lecciones, sino que "también socializan y crean relaciones saludables", apunta Bilbao. Un paso más para conseguir una infancia más pura y unos futuros adultos más sanos.


