Tras saber que Luisa era la diva de Ángel y se había ganado una cita con él, Steisy y Samira se quedaron bastante afectadas. El tronista quiso quedarse a hablar con sus chicas cuando los focos del plató se apagaron porque Steisy estaba llorando. Steisy no entiende lo que le ha pasado a Ángel con Luisa. A ellas les ha castigado por discutir en plató, las ha sentado en la silla caliente, las ha echado y a ella, que se comporta igual, la premia y la da tres citas seguidas. Steisy tiene la sensación de que no le gusta a Ángel lo suficiente y que él no ha hecho nada por ella durante todo este tiempo. El tronista ha intentado hacerle entender a Steisy que él tiene que conocer a otras chicas para estar seguro de su decisión y que eso no significa que no le guste y no sea su preferida, pero Steisy estaba muy afectada y no lo podía entender. Samira estaba totalmente de acuerdo con Steisy y le ha pedido a Ángel que fuera justo porque no lo estaba siendo.

Al ver las imágenes inéditas del programa anterior, Steisy no ha podido contener las lágrimas. Está muy afectada porque tiene la sensación de que o Ángel no está siendo justo o es que ella no le gusta de verdad y la tiene porque da mucho juego. El tronista ha intentado que a Steisy se la quitara esa idea de la cabeza, pero ella sigue teniendo grabado en su cabeza que a ella la sentó en una silla caliente y a Luisa le ha dado tres citas seguidas cuando se comporta igual que ella en las discusiones. Samira también ha pedido Ángel que sea justo con ellas y que si da cita a una pretendienta nueva, también se la dé a Steisy o a ella.

Ángel no se ha mojado mucho ante los reproches de sus pretendientas, pero se ha quedado muy sorprendido cuando Samira le ha comentado que Nacho Montes no se equivocaba al decirla que se estaba quedando sin fuerzas. La pretendienta cree que el responsable de su pérdida de ilusión es Ángel porque un día la dice que la echa mucho de menos y al día siguiente vuelve a dejarla sin cita.