Tony regresó a casa de Oriana para intentar aclarar la discusión que tuvieron cuando le comunicó que era el nuevo tronista, pero no sirvió de nada. Oriana quiso saber si todavía estaba enamorado de ella y Tony le dijo que había visto muchas cosas en ella que no le gustaban nada. Unas palabras que Oriana se tomó como una falta de respeto y que la llevó a pedirle que se marchara. Oriana tiene la sensación de que Tony la conoce de verdad y no se merece esas palabras. Además, la tronista le dijo a las aspirantes al corazón de Tony que lo iban a tener muy difícil porque el tronista busca valores, no solo un físico.