Consejos

Guía del congelado perfecto: qué alimentos se pueden congelar sin perder propiedades ni arriesgar la salud

Congelar a -18ºC es un método seguro y eficaz para conservar alimentos
Congelar a -18ºC es un método seguro y eficaz para conservar alimentos. Freepik
Compartir

Abrir el congelador y buscar qué comer es algo muy común. Encontrar un tupper con lentejas, pan congelado, pescado o filetes de pollo es de lo más habitual. Congelar nos ahorra mucho tiempo, dinero y, si se hace bien, también ayuda a reducir el desperdicio de comida. Pero, a veces, aparecen dudas: ¿realmente se mantiene el valor nutricional de ese alimento? ¿Se puede congelar todo? ¿Es peligroso volver a congelar algo ya descongelado?

Las autoridades sanitarias llevan años insistiendo en que la congelación es un método seguro y eficaz de conservación, siempre y cuando se haga de manera correcta, tanto en la industria como en casa. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) recuerda que mantener los alimentos a -18ºC o menos inactiva los microorganismos que pueden estropearlos o causar enfermedades, aunque no los destruye.

PUEDE INTERESARTE

Congelar no mata las bacterias, pero sí que las frena en seco

Lo primero que hay que saber para entender por qué el congelador es seguro es que el frío congela el agua de los alimentos y, al hacerlo, detiene la actividad de la mayoría de las bacterias y hongos que provocan toxiinfecciones o estropean la comida.

La AESAN y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) coinciden: la congelación va a impedir el crecimiento de patógenos, pero muchos de ellos sí que pueden sobrevivir y reactivarse cuando el alimento se descongela, sobre todo si se mantiene demasiado tiempo a temperatura ambiente.

PUEDE INTERESARTE

Los alimentos que se mantienen congelados de forma continua a -18ºC pueden conservarse indefinidamente desde el punto de vista de seguridad. Los límites de tiempo que se suelen recomendar en las guías suelen referirse a la calidad del alimento: sabor, textura o color.

Por lo que hay que tener en cuenta que congelar no convierte un alimento dudoso en seguro, ya que el riesgo real aparece en la descongelación y en cómo se trata el alimento después.

Qué alimentos se pueden congelar bien

Carnes y pescados

Las carnes frescas como el pollo, ternera, cerdo o cordero se congelan muy bien, siempre que se haga cuanto antes después de comprar y en porciones adaptadas al consumo. La AESAN ofrece tablas orientativas de conservación: 12 meses para vacuno, 8 meses para cordero o 10 meses para el pollo, siempre a la temperatura correcta de congelación.

El pescado blanco se puede congelar bien hasta 6 meses, y el pescado azul y el marisco, es mejor consumirlos antes de 3 meses para evitar que se puedan enranciar las grasas.

Además, en España se recomienda congelar algunos pescados si se van a consumir crudos o poco hechos como los boquerones en vinagre o el sushi casero, y así prevenir el anisakis, siguiendo siempre las indicaciones generales de congelación a -20ºC durante varios días.

Verduras y hortalizas

Las verduras se pueden congelar perfectamente, sobre todo si se escaldan antes de congelar. Esto va a ayudar a mantener mejor el color, reducir la pérdida de textura y conservar vitaminas sensibles.

Las típicas bolsas de verduras congeladas suelen procesarse justo después de cosecharlas, lo que va a permitir que mantengan un perfil nutricional muy competitivo. Pero, hay que tener cuidado con las hortalizas muy ricas en agua como el tomate, el pepino o la lechuga. Éstas se pueden congelar, pero no para ensalada. Después de descongelarlas se van a quedar blandas; serán ideales para cremas, salsas o smoothies, pero no para tomar en crudo.

Frutas

Las frutas congeladas son ideales para batidos o smoothies, repostería o salsas y compotas. Para congelarlas se recomienda trocearlas, separarlas en una bandeja para que no se apelmacen, congelarlas y luego pasarlas a una bolsa de cierre hermético.

También se puede congelar el zumo de cítricos en cubiteras, algo que recomiendan las guías de conservación para conservar naranjas, limones o limas que se vayan a estropear.

Legumbres, platos de cuchara y salsas

Las legumbres guisadas, cremas de verduras, sofritos, salsas de tomate, caldos o estofados son ideales para congelarlos. Además, es una manera de aprovechar el tiempo y hacer diferentes platos para utilizarlos más adelante. Cuando se vaya a hacer, se recomienda que se dejen enfriar, se dividan en raciones individuales o dobles y se etiquete el contenido y la fecha para que no se olviden en el congelador.

En el caso de que sean platos muy grasos como carnes con salsas más grasas, hay que saber que con el tiempo puede aparecer una capa de grasa y cierta sensación de ranciedad, por lo que es mejor consumirlos en 3 meses máximo.

Pan, bollería y masas

El pan es uno de los alimentos que más se congelan en los hogares españoles. Se debe hacer en rebanadas o porciones individuales. Muchos no lo saben, pero se puede tostar directamente aunque esté congelado.

Las masas de pan o de pastelería sin hornear se congelan bien durante varios meses, y las tartas horneadas se pueden mantener en buen estado unos 3-6 meses.