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Una comida familiar, besos y confesiones en el lugar secreto del tronista, un paseo romántico por Santander... Marta había tenido demasiadas emociones fuertes en un mismo día y decidió tomarse su tiempo para reflexionar y no aceptar pasar la noche con Diego. Una decisión que ha podido marcar un antes y un después en su relación porque al tronista le ha demostrado mucha personalidad y su cita ha terminado con un apasionado beso frente al mar.






















