A pesar del horario intempestivo de nuestra visita matutina, el tronista de moda nos recibe con su mejor cara y dispuesto a convertirse en un anfitrión exquisito con sus invitados, a los que va a dejar pisar su templo más sagrado, su habitación. Es el lugar donde más tiempo pasa, junto con el gimnasio. Es su rinconcito particular dentro del chalet de Rivas Vaciamadrid en el que vive con sus padres y al que muy pocas personas tienen acceso.

La habitación es un fiel retrato de la personalidad de Ferchu: un chico especial que conquista por su sencillez. “Cuando estoy en casa siempre estoy en mi habitación”, nos cuenta. Es su lugar especial en la casa y excepto su madre de vez en cuando, nadie tiene permitido el acceso. Su habitación está llena de recuerdos pero sin duda alguna: “lo más especial de su mi casa son mis padres”, confiesa.

La luz entra a su habitación por un enorme ventanal con vistas al jardín. Una gran cama preside la estancia, junto a una mesita de noche, un escritorio y un montón de estanterías donde tiene colocados todos sus trofeos. A primera vista podríamos decir que se trata de la habitación de cualquier chico de 26 años que vive con sus padres, pero el oso rosa de casi dos metros y resto de peluches que le acompañan delatan su condición de tronista. “Guardo todos los regalos de mis pretendientas con mucho cariño”, asegura.

No guarda solo los peluches, tiene además un armario lleno de cartas, fotos y regalitos más pequeños que las chicas le han ido entregando durante estos meses. Además, conserva los carteles de casi todos los bolos a los que ha asistido e incluso, nos mostró la foto de uno de ellos que le habíamos hecho hace unos años en su visita a telecinco.es.

Fotos, recuerdos, perfumes, carteles, caricaturas… objetos todos que forman parte de su intimidad y que solo la pretendienta elegida podrá descubrir.

Pero la verdadera reina de la habitación y del tiempo libre del tronista es su Play Station 3. Le vuelven loco los juegos de coches, “siempre juego al Gran turismo”.

El resto del tiempo libre en casa lo dedica a navegar por Internet y a consultar Facebook. A pesar de su fama de casero, tiene 26 años, es guapo y tronista para más señas, así que no hace falta decir que de vez en cuando sale de fiesta con sus amigos, siempre que el cuerpo se lo pide y el trabajo se lo permite.

Como él mismo nos confesó, ha vivido muy deprisa y ahora ve la vida desde otro punto de vista.“Tengo las cosas claras y quiero formar una familia y encontrar el amor”, nos confiesa dejando al descubierto su vena más hogareña y familiar.

El significado de sus tatuajes

“Esto es un vicio, cada vez más”, así se refiere a todos los tatuajes que decoran su cuerpo. Empezó muy pequeño dibujándose un sol alrededor del pezón y no ha podido parar. Pero todos tienen una explicación y un significado. Casi todos son frases que hacen mención a momentos que ha tenido en su vida, para que cuando pasen los años acordarse de ellos. Ferchu es consciente de que cada cosa que le ha pasado en la vida tiene unas consecuencias y, sobre todo, no quiere por nada del mundo dejar de ser el chico humilde que es: “Aunque llegue a la fama yo soy como soy y no voy a cambiar”.

Así es y así vive Ferchu, un chico cariñoso, dulce y atento que se esconde tras una apariencia brusca y un cuerpo perfilado y tatuado hasta la perfección.