Antes de que Emma diera paso a la cita que habían tenido Fede y Clara, el tronista ha comentado que a Clara le gusta hablar demasiado y ella muy tranquila, le ha respondido asegurando que lo que había dicho fuera del plató se lo iba a decir a él a la cara. Al ver la cita, nada hacía pensar que estaba a punto de estallar una grandísima discusión entre el tronista y la pretendienta. Fede estaba encantado con su pretendienta y consideraba que tendía algo que para él es fundamental en una mujer, agilidad mental.

Al volver de la cita, Fede y Clara estaba de pie en el plató y Clara ha pedido la palabra para decirle a Fede muy finamente que se marchaba. La pretendienta ha decidido abandonar la conquista del tronista porque considera que no es lo suficiente maduro como para despertar su admiración y ella necesita admirar a su pareja. Fede no le ha dejado que continuara y ha estallado lleno de ira: "No voy a permitir que me dejes mal porque eres una sinvergüenza". Unas palabras que han herido muchísimo a Clara, quién le ha dejado claro a Fede que se iba a arrepentir de decir una cosa así. A ella nadie la llama sinvergüenza.

Fede asegura que Clara ha estado hablando mal de él a sus compañeras desde el principio y ella tiene clarísimo que todo lo que piensa de él se lo ha dicho a la cara y por si no lo recordaba se lo ha vuelto a repetir. Clara cree que Fede es un prepotente, inmaduro, soberbio, que tontea con todas, que no tiene educación, que ni las mira en plató... Pero Fede no terminaba de contar que era lo que Clara había dicho de él y la pretendienta se ha puesto tan nerviosa que ha terminado soltado el comentario que le hizo Fede antes de la cita y que le hizo que su ilusión por él se desvaneciera por completo.

Todo el plató estaba en tensión porque tanto el tronista como la pretendienta estaban fuera de sí, pero no terminaban de dar detalles concretos. Clara tiene clarísimo que ningún hombre la va a tratar de esa manera y ha comentado que Fede le dijo antes de la cita que sus amigos italianos pensaban que tenía "cara de cerda y que la debía de ir mucho la marcha". Un comentario muy poco afortunado que el tronista ha intentado negar, pero no lo ha conseguido. Nadie sabía muy bien lo que estaba pasando y Clara se ha derrumbado. Para ella es muy importante la imagen que da en el programa porque le ve su familia y no quería que las cosas sucedieran así. Además, la pretendienta se sentía traicionada porque alguna de sus compañeras le había dicho a Fede que estaba hablando mal de él cuando no era cierto, ella ha sido clara y todo lo que piensa se lo ha dicho a él. Y por si todavía no le había quedado claro se lo ha vuelto a repetir.

El resto de pretendientas se han quedado mudas y ninguna parecía ser la que le había contado a Fede que Clara hablaba mal de él. Según Clara porque no era cierto y porque todas pensaban lo mismo del tronista. La situación ha llegado a tener muchísima tensión y Fede ha decidido rectificar. Es consciente de que es soberbio en ocasiones, pero quiere cambiar esa parte de su carácter y tiene la sensación de que se ha puesto como un toro cuando Clara le ha llamado inmaduro. Fede le ha pedido perdón a Clara porque siente que se ha equivocado con las palabras. La pretendienta las ha aceptado y se ha vuelto a derrumbar.