Tras la gala final (y después de comerse un kebab en la calle), Omar se fue a su casa para estar con todos sus amigos y familiares y contarles cómo había vivido la experiencia. El ganador de ‘Supervivientes’ estaba encantado con su nuevo físico: ahora puede quitarse la camiseta en sus conciertos” Es increíble tengo que pasar dos veces para que se me vea”.