La segunda cita entre Ruth y Massimo ha empezado de una forma muy tranquila: plasmando sobre un lienzo en blanco lo que para ellos significa el amor. El encuentro no ha tardado en animarse, justamente cuando ha hecho su entrada en escena Iván que desde la sombra observaba la cita. Al italiano no le ha hecho ninguna gracia que el tronista apareciese en el único momento que tiene para estar a solas con su chica. Iván le ha dicho que él puede ir donde quiera porque, en sus propias palabras, "Mi Ruth es mi Ruth". Massimo le ha contestado que no tiene ni idea, que él simplemente es un "calentón". Ruth ya no sabía ni dónde meterse en esta cita tan incómoda para ella y hasta ha llegado a responder que no a la propuesta de Iván de irse con él a pasar diez minutos a solas. Aunque Ruth le ha pedido a Iván que se vaya, Massimo se ha quedado un poco rayado porque cree que Ruth debe ya ponerle las cosas claras a su ex pretendiente.