Manu ha llegado con muchas ganas de ver a María y no ha tardado nada en demostrárselo. “Si no te beso, reviento”, le ha dicho justo antes de lanzarse a sus labios. La pretendienta no ha podido resistirse, a pesar de ser muy pronto para ella y haberse prometido no besarle nunca delante de las cámaras, como ya hizo con su anterior extronista. “Para mí el beso era un tema tabú”, le ha confesado a Manu, que se ha quedado de piedra al saber que la chica siempre había controlado este tema por respeto a su familia. El tronista no quiere que sus besos le causen ningún problema familiar, pero María no se arrepiente y una vez roto el hielo, no han parado de comerse a besos.