Carmen ha bajado las escaleras muy seria e Iván ha querido saber si así iba a ser su imitación de Ruth, pero ella le ha explicado que no quería hacer el reto porque no le parecía bien imitar a la chica que le gusta o le ha gustado. Carmen y sus amigas entienden que así no se conquista a un chico y que en cierta manera es una falta de respeto para las pretendientas y para la propia tronista. Iván ha entendido su postura en parte, pero le ha dicho que él necesita chicas que se disfracen por él y le saquen una sonrisa.