Ana ha intentado justificar lo sucedido en su última cita con Labrador explicando que ambos tenían la necesidad de decirse muchas cosas y que lo hicieron, pero no de la forma adecuada. Una conclusión con la que Labrador no estaba de acuerdo. El tronista cree que Ana empieza de cero en cada programa y que se olvida de todo lo que han vivido juntos incluso, que cuando la habla no se entera de nada de lo que le dice porque a los cinco minutos se le ha olvidado. Ana ha asentido con la cabeza y ha dicho que no es que el tronista tuviera razón, pero que tenía la sensación de que la situación le está superando: "Parece que no, pero esto es muy complicado porque cada día siento más por él".