Un corazón gigante, un baile sexy, una pancarta, bombones, champán... Susana ha conseguido en un solo reto que los ojos de Manu brillen de felicidad. "Me ha encantado de principio a fin, estoy hasta nervioso", ha asegurado Manu feliz con todas y cada una de las sorpresas de Susana. Los tronistas han estado de acuerdo en que les había recordado a su paso como pretendientes.

Con ritmo latino y con un montón de globos con forma de corazón en la mano, y repartidos por el público, Paola ha bajado las escaleras para celebrar la semana del amor con Manu. Los jóvenes han bailado muy agarraditos y Paola se ha emocionado al entregarle al tronista un regalo muy especial que había hecho ella misma. En un álbum con forma de corazón, la pretendienta ha escrito su historia de amor y lo que siente por Manu, y no ha podido contener las lágrimas. Muchos no creen las lágrimas de Paola, pero el tronista ha aclarado que él sí la cree y que siente que Paola es una buena niña.

Brenda ha comentado desde las gradas que no le había gustado el desfile de Paola y que tiene la sensación de que la sangre latina no la tiene muy bien desarrollada para el tema del baile. Paola ha respetado su opinión, pero le ha invitado a bailar con ella para demostrarle que el ritmo latino corre por sus venas. Brenda ha aceptado la invitación y ambas han demostrado su arte moviendo la cadera.

Al ver a Paola bailando con Brenda, Jesús Reyes se ha puesto celoso porque su Labrador no había bajado las escaleras para bailar con él y Marta se ha chivado. El expretendiente se ha intentado resistir, pero ha terminado bajando las escaleras para mover la cadera junto a Jesús Reyes. El estilista estaba feliz de bailar con Labrador, de que le tocara el trasero y de que se dejara rodear de una lluvia de besos.

Muy sensual y al ritmo de la canción final de la película 'Dirty Dancing', Shaila ha intentado sorprender a su tronista. Incluso, no ha dudado en simular la escena del salto dándole igual que se le viera todito, todo. Shaila lo ha intentado, pero Jesús ha comentado que había visto lo mismo de siempre, pero con otra música. Sin embargo, Shaila no ha querido entrar en polémicas y se ha centrado en entregarle a Manu los regalitos que le había traído. Manu parecía contento, pero en lugar de lanzarse a los labios de Shaila, como había hecho con Susana y Paola, se ha centrado en comerse el cupcake en forma de corazón que le había regalado la pretendienta.

La cara y la actitud de Manu dejaban claro que algo estaba pasando, y Shaila no ha esperado a que el tronista se lo dijera. La pretendienta no es tonta y sabe que algo pasa entre ellos. Entiende perfectamente que Manu no tenga ganas de avanzar con ella en las citas después de verla discutir con unos y con otros todo el día en plató, y la verdad es que a ella también se le quitan las ganas. Shaila ha deseado a Manu que encuentre el amor dentro del plató y ha explicado que ella lo intentará encontrar fuera porque no quiere que ambos sigan perdiendo el tiempo. Manu ha estado de acuerdo con Shaila en sus argumentos y también con Jesús Reyes, quien a pesar de sus diferencias con la pretendienta, ha reconocido que lo había dado todo por su tronista y que era una buena pretendienta.

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Como un huracán de sensualidad, Diolinda ha entrado en el plató bailando salsa y ha conseguido que hasta a su tronista se le fueran los pies detrás de ella. La pretendienta que normalmente suele desfilar muy cortada, ha dejado a todo el mundo sorprendido con el ritmo y la tranquilidad que ha demostrado bailando salsa con Iván. Antes de que la pudieran decir nada, Diolinda le ha entregado a Iván un collage de su paso por el trono en el que también había fotos de María, la extronista. Un detalle que ha sorprendido a los tronistas y que le ha servido de pie a Diolinda para comunicar a Iván que abandonaba su conquista. Ante la sorpresa generalizada, Diolinda ha explicado que había desfilado más tranquila porque ya no tenía presión al haber tomado la decisión de marcharse. La pretendienta estaba bloqueada porque Iván le estaba pidiendo cosas que ella no le puede dar tan rápido y no quiere perder el tiempo. Iván, Emma y Jesús, le han pedido a Diolinda que meditara su decisión un poquito más, pero ella parecía tenerlo muy claro. Eso sí, hasta que Iván la ha mirado a los ojos y le ha pedido una última cita. Diolinda se ha dejado llevar y ha besado a Iván como nunca lo había hecho antes y ha aceptado quedarse un poquito más.