Saltamos al terreno de juego del Alcobendas

CRISTINA NAVAS / SANDRA SALINAS
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Hemos desayunado con él, le hemos acompañado hasta Telecinco, hemos recorrido una y otra vez los pasillos de la cadena tras sus pasos y, los más importante: le hemos visto elegir a Soraya.

Hemos sido testigos de cada uno de los momentos de un día que, seguro, el tronista no podrá olvidar. Qué mejor manera de despedir el día que descubriendo otra de sus facetas, su verdadera profesión, la de futbolista.

Son las 19:30 de un largo día, pero no queremos perdernos nada y volvemos a coger nuestra cámara para trasladarnos a Alcobendas. Una vez más, el tráfico nos hace aún más largo el recorrido hasta el campo de fútbol del equipo de fútbol de Efrén.

Allí, el futbolista nos espera frente a las puertas del vestuario. Flamante, más relajado y tranquilo, nos invita a colarnos en los vestuarios para que veamos donde pasa gran parte de su día. Nos muestra la pizarra de las estrategias, los bancos… e incluso nos atrevemos a meterle en la ducha, eso sí, vestido.

Nos muestra la equipación, el número 9 que es el que suele llevar el malagueño en los encuentros. Vemos a un Efrén en otra faceta, pero sigue siendo el mismo.

Nuestro tour por los vestuarios lo interrumpen un par de compañeros de Efrén así que decidimos que sean ellos los que nos cuenten aquello que el hasta ahora tronista nos ha ocultado.

Los futbolistas aseguran que "no estamos acostumbrados con esto" y es que el público desde la grada reconoce a Efrén "a veces se meten con él pero nosotros en el vestuario con él a muerte", nos cuentan.

Alguna anécdota…“el otro día estábamos jugando y unos chavales con un megáfono dándole caña, que eligiera a una, a otra…”

Pero a nosotras nos intriga algo en particular, ¿cómo es Efrén en la ducha? Pero eso "es secreto de sumario". Algo que sólo descubrirá la afortunada pretendienta "ya a quien le toque, pues fíjate, ahí tiene para hincharse", lo que arranca una sonora carcajada de Efrén.

Así, tras conocer los vestuarios saltamos al terreno de juego y vemos lo que mejor se la da hacer a Efrén: jugar al fútbol. ¡Qué mejor forma de despedir nuestro día con él!