Carles Puigdemont queda en libertad con medidas cautelares mientras se resuelve el proceso de extradición y los magistrados deciden si hubo o no delito de malversación. Lo que sí tienen claro es que no hubo rebelión o el delito equivalente en la justicia alemana, alta traición Pero ¿qué argumentos esgrimen?
El tribunal alemán considera inadmisible extraditar a Puigdemont por rebelión argumentando dos puntos: en el proceso soberanista no se ha ejercido una violencia suficiente para que el delito tenga correspondencia con el de alta traición que rige en el país germano.
La justicia alemana solo acepta como violencia la que es capaz de doblegar el orden constitucional, el que logra sus objetivos y escriben: “Es cierto que debe ser hecho responsable de los actos de violencia cometidos el día del referéndum (…) Sin embargo, esos actos de violencia (…) no ejercieron tal presión sobre el Gobierno como para que considerara rendirse”.
Por ello, decretan libertad bajo fianza de 75.000 euros, una cifra que ya ha pagado la ANC vía transferencia, y descarta el riesgo de fuga. Mientras decide, tendrá que presentarse ante el juez una vez a la semana.