Dicen que los polos opuestos se atraen pero en el caso de Patricia y Álvaro ni se atraen ni tienen un solo punto en común. La cita ha discurrido en un ambiente frío donde no se han dejado conocer, pues han preferido descubrir la opinión del otro en temas nada triviales. Patricia y Álvaro no han mostrado un ápice de química ni chispa, de hecho, ni el físico le ha llamado del otro: “Tu cara no me ha enamorado”, le confesaba él.
Ella es una defensora nata de los animales y está en contra de la tauromaquia. Algo que a Álvaro no le ha gustado pues según cuenta “solo mira lo políticamente correcto y obvia el resto de animales”. Además, Patricia ha participado en el partido PACMA durante varios años: “Soy muy animalista y estuve metida en el PACMA”. Sin duda, lo mejor que han podido hacer es decir no, pues no tienen nada que ver.