Tania estalla ante la tranquilidad de su cita en ‘First Dates’: “No tiene sangre, me lo como con papas”

  • Ver ‘First Dates’ (04/05/23), online y completo en Cuatro

  • A Tania no le gustan la gente del norte de España: “Son muy serios y allí hace mucho frío”

  • Tania asegura ser sincera en ‘First Dates’, pero a su cita le miente: “Bien, me he reído un montón”

Tania y Rosi son sobrina y tía, amigas, confidentes y en esta ocasión quieren vivir juntas la experiencia de buscar el amor en ‘First Dates’. Las dos se definen como mujeres muy coquetas “antes me pintaba los labios hasta con la mascarilla”. Rosi le ha contado a Carlos Sobera que había tenido dos relaciones largas, que era mamá y que ya llevaba 4 años sin pareja. Le dicen que es exigente, pero ella lo que está buscando es a una persona sincera, trabajadora y luchadora “que te dé el cien por cien como soy yo”. Tania sin embargo, busca a una persona con paciencia, cero posesivo y al que le gusten los niños.

Carlos Sobera les ha propuesto un juego y que Rosi fuera la que recibiera a la cita de su sobrina para comprobar si podían hacer match o no. Diego, la cita de Tania, se ha presentado como un soltero muy asturiano al que le gusta ir al monte en verano, la fabada y los cachopos. Asegura que no liga nada de nada, pero al ver a Rosi ha sentido que le habían puesto una cita “un poco mayorcita”, no podía imaginarse que Rosi era la tía de su cita.

Rosi ha comenzado a preguntarle por su profesión y por su edad, pero Diego ha mantenido el tipo y se han pasado un buen rato juntos. Él estaba dispuesto a cenar con ella a pesar de la edad, pero Rosi le ha contado que su cita era su sobrina. Al conocer a Tania, el soltero ha sentido que era más su tipo, pero la cosa no parece haber sido correspondida porque ella ha asegurado que su físico no era lo que esperaba “no me pondría a hablar con él en una discoteca”.

Tania ha querido saber cómo había sido la vida sentimental de su cita y Diego le ha contado que había tenido varias relaciones, pero que no tenía hijos. Ella sí tiene un hijo de 11 años y por más que miraba a su cita, no le encontraba el atractivo “no me gusta la gente del norte, son muy serios y en el norte hace mucho frío”.

Diego estaba encantado y ella le ha dicho que también estaba muy cómoda, pero no era cierto porque ella es amante del cachondeo y a él le estaba viendo muy serio. Su cita no le había gustado y todo le servía para ir encontrando motivos que les hicieran incompatible. Diego le ha dicho que era un chico tranquilo, sin mucho genio y que podía encajar bien con su genio y su afirmación de “soy una bomba a presión”, pero ella necesita a un chico con más carácter y celoso “¿Qué es eso de celoso si me das motivo? Eso es muy normal”.

La soltera ha repetido hasta la saciedad que ella es una chica muy sincera y que va con la verdad por delante le moleste a quién le moleste, pero cuando Diego le ha preguntado que qué tal, ella le ha dicho “bien, me he reído un montón”. Incluso, le ha dicho que su físico también le parecía bien.

En el momento de la decisión final, sí ha sido sincera incluso, de más. Diego ha dicho que sí quería repetir y ella le ha dicho que no, que se veía con mucho carácter para él y que no le veía formando parte de su vida “muy cuadriculada”. Diego se lo ha tomado bien y ella ha exclamado un “¿Lo ves? No tiene sangre, yo no puedo con esto, me lo como con papas”. Diego se ha quedado perplejo y al escucharla “yo ya tengo un niño, no tengo dos, no puedo arrastrar a otro más. Yo voy por delante, creo”, le ha dicho muy educado “con eso no estoy yo de acuerdo”.