El desagradable comportamiento de un soltero de ‘First Dates’ con los clientes guiris: “Tus muertos”

  • Ver ‘First Dates’ (21/04/23), online y completo en Cuatro

  • A Roxana no le parecen bromas lo que Daniel hace con los clientes: “Son faltas de respeto”

  • Roxana está cansada de ser camarera: “Quiero escribir un libro sobre mi vida”

Roxana y Daniel son camareros en Málaga y hablando de sus respectivos puestos de trabajo, han descubierto que hay muchas formas de tratar a los clientes. Ella les puede gastar alguna broma, pero lo de él son más “faltas de respeto”.

Roxana no ha contado en su presentación en ‘First Dates’ que juega a compararse con Scarlett Johansson con sus amigos y que le resulta muy divertido porque es una mujer muy bella. Está soltera porque animó a su pareja a cumplir su sueño y marcharse del país, siente que se entrega más a los demás que a ella misma.

No tiene un prototipo de chico, puede que alguien no le guste, pero al conocerle empiece a hacerlo. Le gustan mucho las bromas, el sarcasmo, el vacile… Daniel, su cita, tiene la sensación de que la gente al verle piensa que “soy un poco chulo, un poco gilipollas”. Cree que hay que conocerle y que tiene un punto de narcisista, pero “también valoro mucho a las otras personas”.

Al conocerle, Roxana ha sentido que era el típico chico de Málaga “moreno, con barba”, pero le ha gustado que vivieran cerquita. Él la ha visto una chica muy atractiva, pero al sentarse en la mesa se ha quedado de piedra. Antes de pedir la cena, Roxana le ha hecho una pregunta “¿Tienes planes para irte del país?”. Daniel se lo ha pensado, pero le ha respondido con un sí y ella ha puesto punto final a la cita “Entonces otro, por favor”. Entre risas, le ha dicho que era una broma, pero Daniel reírse, lo que se dice reírse, no se ha reído.

“Este es un mujeriego que viene aquí a echar el rato”, ha sentido Roxana cuando Daniel le ha confesado que un poquito travieso y un poquito pillo sí que era. Él le ha contado que era camarero, pero que ya estaba muy cansado de la profesión. La soltera también es camarera y quiere dejar el trabajo y “escribir un libro”.

Daniel ha flipado al saber que su cita quería escribir un libro de su vida y que ya llevaba dos páginas porque él “no me he leído ni uno en mi vida”. El soltero asegura que en el colegio se leía algún párrafo y le daban mareos.

Entre las aficiones del soltera están la playa y el gimnasio, y al saberlo, Roxana le ha preguntado que si tenía abdominales y ha bromeado al respecto “todo el mundo va al gimnasio y a nadie se le nota por los bollos de después”. Al tener la misma profesión, los solteros han hablado de sus puestos de trabajo y Daniel le ha contado que él estaba muy tranquilo trabajando en un restaurante de guiris.

Roxana le ha dicho que alguna vez había bromeado con los clientes extranjeros “¿Una coca-cola? Para ti mi cola”, pero no le ha gustado nada escuchar el tipo de “bromas” o “faltas de respeto” que Daniel y su jefe les hacía a los clientes que no hablaban español “tus muertos” o “mi exjefe se acercaba y decía “¿Quién me va a comer la polla de los dos?”. El soltero asegura ser “de la escuela veterana”.

Roxana, antes de tomar la decisión final en ‘First Dates’: “No me has enseñado los abdominales”

Jugando al Rasca del Amor, los dos han coincidido en que les había sorprendido practicando sexo. Ella le ha contado que su hermano pequeño entró en la habitación en un momento en el que ella estaba con su primer novio y “no podía hablar, tenía algo en la boca”. Y él le ha contado que fue su padre quién abrió la puerta “yo estaba soplando nuca y ella mordiendo almohada”.

En el momento de la decisión final, Roxana ha puesto a Daniel contra las cuerdas “No me has enseñado los abdominales”. El joven se lo ha pensado, pero le ha dicho que mejor en privado. Él sí se ha mostrado a favor de volver a quedar con Roxana porque la ha visto una chica “muy cachonda” y ella ha aceptado. “Estás deseando verme los abdominales… Hay algo que me crea curiosidad de él y todavía no sé lo que es”, ha asegurado la malagueña con mucho arte.