Juanjo y Estefanía se congelan en el jacuzzi de ‘First Dates’: “Así se conocieron mis abuelos”

Estefanía parecía haberse olvidado del físico de su cita en ‘First Dates’, pero al quitarse la ropa ha sentido que el frío de la Semana Blanca se apoderaba de ella y se ha quedado petrificada en el jacuzzi.

Estefanía, es una mujer a la que le gusta cuidarse “mis tacones, mi bolso…”. Asegura ser muy selectiva y buscar una combinación perfecta “fiel, atento, cariñoso”. Ha tenido momentos de felicidad máxima y otros de mucho sufrimiento, pero ahora “como perra empoderada, no volvería a pasar por lo mismo”.

Juanjo, su cita, asegura que su vida son como pequeños días “nazco por la mañana y muero por la noche, por lo que aprovecho todo lo que me da el día”. Al verle, Estefanía ya ha tenido claro que no le gustaba su físico “no es mi prototipo”. Él es administrador de un edificio de apartamentos en la montaña, pero nació en Mallorca.

A Estefanía le ha sorprendido que Juanjo fuera profesor de yoga y también practicara pesas y boxeo, pero le ha gustado saber que tenía esa parte más espiritual. Él ha tenido la sensación de que su cita no tenía pinta de tener mascota, pero se ha confundido. Estefanía le ha contado que tiene a Chanel, una bulldog francesa que la tiene enamorada. Casualidad del destino que Juanjo también tiene dos perritos de la misma raza y que los considera sus hijos. La cita ha comenzado a fluir.

Juanjo le ha contado a su cita que estaba buscando a una persona que le motivara y que compartiera sus principios. Ella ha estado de acuerdo y también han coincidido en que los dos solo van al gimnasio por la mañana que hay menos gente en el gimnasio “sentadillas a las nueve de la noche, ¿Estamos locos?”. El soltero le ha confesado a Estefanía que estaba muy cómodo con ella y le ha dicho que tenía unos ojos muy bonitos, ella se ha sonrojado y le ha reconocido que los ojos era lo único de su físico que no era artificial “los ojos sí, son míos”.

Al soltero le ha encantado lo que ha visto cuando su cita se ha quitado el mono de nieve y se ha quedado en bikini. De hecho, ha querido sentir su energía y le ha pedido un abrazo, pero Estefanía no estaba dispuesta a darle nada más. Le ha dado el abrazo y él ha sentido que a ella le gustaba ir poquito a poquito “me gusta, así es como se conocieron mis abuelos”, pero no esperaba que tras las capas de su cebolla escondiera unas calabazas.

La soltera le ha ofrecido su amistad, pero él le ha dejado claro que había venido a buscar amigos y que quería enamorarse. Ha rechazado la amistad de Estefanía y ha dado su cuenta de Instagram para que las mujeres del mundo se acercaran a él.