Con peluca y a lo loco: Carlos Sobera se desmelena en ‘First Dates’

  • Sara enseña al presentador a bailar zumba y le presta su peluca de color azul

  • La timidez de Odette marca su cita con Sara en ‘First Dates’: “No es lo que estoy buscando”

  • Sara no consigue que Odette se levante del sofá en el reservado: “Ha sido muy soso”

Sara ha venido a ‘First Dates’ en busca de una mujer que le diera caña y le siguiera el ritmo y lo único que ha conseguido es que Carlos Sobera le robara la peluca y se convirtiera en su mejor alumno de zumba. La timidez de su cita no ha dejado que la cosa fluyera entre ellas.

Sara ha llegado a ‘First Dates’ dispuesta a encontrar a una chica transparente con la que compenetrarse y apoyarse mutuamente, pero antes ha conseguido revolucionar a Carlos Sobera. El presentador no se ha resistido a ponerse su peluca azul y a aprender a bailar zumba.

Sara es una chica muy abierta a la que le encanta relacionarse y conocer a gente. Al verla, Carlos Sobera se ha interesado por su pelo y al saber que era una peluca, no ha dudado en aceptar su ofrecimiento “¿Te la quieres poner?”. El presentador se atreve con todo y hasta ha aceptado que la soltera le demostrara como son sus clases de zumba. Eso sí, se ha dado cuenta de que lo de llevar peluca muy cómodo no es “Da mucho calor”.

Odette siempre ha sido una chica tímida “siempre me ha costado abrirme y hablar con la gente”. Al entrar, se ha llevado una buena impresión de Sara, le ha gustado con el pelo azul y con el pelo rojo, pero su timidez no le ha dejado demostrar demasiada alegría. Carlos Sobera le ha pedido a Lidia Torrent que sacara sus dotes de Celestina para que las jóvenes se enamoraran durante la cena.

Sara ha intentado llevar las riendas de la cita porque se ha dado cuenta rápidamente que Odette no era la chica cañera que ella estaba buscando. La joven le ha explicado que era muy tímida y que le costaba un poquito romper el hielo. Con 18 años no era capaz ni de hablar con extraños y sus amigos son fundamentales para ella.

En el terreno de las relaciones, Odette le ha explicado a Sara que ella no entendía porque las personas heterosexuales no tenían que dar explicaciones a su familia y las que no lo eran sí. Ha tenida una relación de casi dos años, pero asegura que para la otra parte no era una relación como tal y que fue muy tóxica. Sara le ha preguntado por las relaciones abiertas y le ha dejado claro que no es una opción.

Sara estaba un poco decepcionada porque sentía que Odette no le estaba preguntando nada a ella. Las jóvenes han tenido una cita demasiado tranquila para lo que Sara esperaba y se ha sentido un poco decepcionada al comprobar que Odette no estaba dispuesta ni a que le enseñara unos pasos de zumba en el reservado. Han congeniado para ser amigas, pero nada más. Sara necesita a alguien mucho más cañera que Odette.