El reportero de ‘En el punto de mira’ Boro Barber se ha desplazado hasta Cullera para intentar hablar con un cuidador de ancianos que supuestamente ha expoliado las propiedades de los octogenarios Antonio y María Emilia. Además, regenta una inmobiliaria en la que alquila uno de los chalets de los ancianos por más de 3.000 euros la quincena diciendo que es suyo. Cuando el reportero le pide hablar con él se encierras en dicho chalet y saca de sus casillas a Boro: “Este es el caso que más me ha indignado de todo lo que he grabado en mi vida”.