Una mujer de Vallecas entra en su casa, destrozada por los okupas

  • El inquilino deudor se fue, pero ha tardado un año y medio en recuperar su vivienda

Después de un año y medio de lucha, Adriana ha podido volver a entrar en su casa, que ha sido arrasada por los okupas. Como propietaria, firmó un contrato de alquiler con un inquilino que, finalmente, no pagó lo prometido y al que no podía echar. Éste se ha dedicado a destrozarle la casa: le ha roto el suelo, la vitrocerámica, le ha robado un sofá… y ha tenido dos meses a dos perros abandonados en una habitación.

Además del mal olor y de todo el sufrimiento que Adriana ha pasado al ver cómo le destrozaban la casa sin que ella, por ley, pudiera hacer nada, esta propietaria también ha denunciado que su inquilino okupa, al marcharse, dejó a dos perros encerrados a los que ella no podía abrir para no meterse en un problema judicial.