Muerte de Julen al caer en un pozo en Totalán: El dueño de la finca tendrá que pagar 885.000 euros de fianza

  • David Serrano, acusado de un delito de homicidio imprudente

La magistrada del Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga, que instruye el caso por la muerte de Julen reclama una fianza de 885.000 euros a David Serrano, dueño de la finca donde falleció el pequeño de dos años al caer en un pozo que no estaba debidamente tapado. Serrano está acusado por un delito de homicidio imprudente grave.

La jueza le reclama una fianza de 885.310 euros para responder de las posibles indemnizaciones a las que David Serrano tendrá que responder, en el supuesto de ser condenado. Serrano ha defendido que el pozo de casi 60 metros donde cayó Julen estaba tapado, La magistrada da un día de plazo para depositar la fianza y y de no hacerlo, se le embargarán sus bienes, se advierte en el documento.

Las acusaciones han pedido penas de prisión para el propietario de la finca donde estaba el pozo en el que cayó Julen y ante la existencia de indicios de criminalidad –tal y como reflejó en su resolución del pasado julio–, la magistrada ha decretado la apertura de juicio oral contra David Serrano.

La defensa del dueño de la finca muestra su rechazo a que la jueza ha trasladado el peso de las obligaciones de seguridad a David Serrano, y ninguna al pocero, como si "no tuviera nada que ver".

Serrano ha mantenido que el padre de Julen fue avisado de la existencia de varias prospecciones. Sin embargo, la jueza considera que el dueño de la finca no adoptó ninguna medida de seguridad para evitar el accidente y que además las obras realizadas en la finca para la ejecución de las perforaciones y zanja carecían de cualquier tipo de autorización exigible para la ejecución de obras realizadas sobre el terreno.