Cinco años de cárcel para Rodrigo Lanza por el crimen de los tirantes

Por "delito de lesiones dolosas con homicidio imprudente"
La Audiencia Provincial de Zaragoza ha condenado a 5 años de cárcel a Rodrigo Lanza por la muerte de Víctor Laínez en el conocido como crimen de los tirantes, según informa #ÚLTIMAHORA Sentencia del "crimen de los tirantes". La Audiencia Provincial de #Zaragoza condena a 5 años de cárcel a Rodrigo Lanza por la muerte de Víctor Laínez. #BDAragón #AN1 pic.twitter.com/qFr7Y8fOC5
— Aragón TV (@aragontv) November 26, 2019" target="_blank" >Aragón TV. Lanza también deberá afrontar una indemnización de 200.000 euros.
Rodrigo Lanza, de 35 años, ha sido condenado a cinco años de cárcel por "un delito de lesiones dolosas en concurso ideal con homicidio imprudente", según la sentencia de ka Audiencia. El fallo contempla el atenuante de arrebato leve y el agravante de obrar por motivos de "odio ideológico".
También ha sido condenado a una indemnización de 200.000 euros en concepto de responsabilidad civil.
Rodrigo Lanza protagonizó una pelea con Víctor Laínez en un bar de Zaragoza. Laínez murió cuatro días después en el hospital debido al fuerte golpe que recibió en la cabeza al caer desplomado al suelo.
La sentencia, al detalle
El magistrado señala en la sentencia que el jurado popular llegó a la conclusión de que la intención de Rodrigo "era sólo lesionar" a Víctor "y que no hubo intención de matarle”, basándose en los informes de los peritos médicos de Barcelona, propuestos por la defensa.
El presidente del tribunal del jurado también entiende que en el delito de lesiones confluye la agravante de alevosía, ya que el acusado se abalanzó de forma sorpresiva sobre la víctima por la espalda y le asestó un golpe seco en la cabeza, sin que tuviera posibilidad alguna de defensa.
No hubo agravante de ensañamiento. El magistrado considera que "fue terrible el resultado padecido, e indudable la brutalidad del acusado pero “no prolongó el sufrimiento" de Víctor Laínez, "pues el anterior golpe con el suelo, según el jurado popular, fue el que le dejó inconsciente, aunque con vida hasta el día de su fallecimiento".
En lo referente a la agravante por motivos ideológicos, el magistrado estima que concurre porque Lanza "actuó con la exclusiva finalidad de reivindicar su ideología, al margen de cualquier consideración personal" y fue precisamente la ideología la que movió al acusado a ejecutar su acción con la víctima por su estética y simbología.
Si tiene en cuenta el atenuante de arrebato, al considerar probado que, al menos en dos ocasiones, sus amigos advirtieron al acusado de la existencia de una navaja lo que pudo producirle un estado de arrebato o furor leve.
