Cuatro al día ha entrevistado a Antonio Marcos Flores, un trabajador de un ambulatorio de Valladolidad donde uno de los ciudadanos que acudieron a hacerse una PCR perdió los nervios por completo. Este sanitario ha explicado lo ocurrido con todo detalle:
"Habíamos citado a varias personas a las 9:30 de la mañana pero nos surgió una urgencia de última hora. Cuando volvimos, esta pareja de pacientes se quejaron y nos insultaron, pero se marcharon del centro. Lo que no esperábamos es que, al rato, fueran a volver el doble de agresivos", ha contado en una llamada telefónica.
Flores ha relatado el miedo que pasaron después, tanto él como sus compañeros: "Cuando volvieron, nos amenazaron con matarnos y muchas cosas más y, afortunadamente, nos dio tiempo a cerrar la puerta de cristal del ambulatorio, que él mismo rompió de un puñetazo y que estaba dirigido a mí", ha lamentado este profesional, que ha recordado la importante labor y el cansancio que tienen todos los médicos y enfermeros tras una pandemia que parece no tener fin a nivel mundial.