Veteranos kurdos toman sus viejas armas contra ISIS
Ajados por el tiempo y cansados de la guerra, así son los guerreros kurdos voluntarios que luchan para liberar a su país para el que muchos lucharon antes. Luchan por Irak contra los yihadistas del Estado Islámico. A una edad en la que muchos creen mejor estar tranquilamente en casa, ellos, con valentía, han decidido volver a la primera línea de fuego. Visten con orgullo uniformes de segunda mano y armas sobrantes de las guerras pasadas, incluyendo AK-47 que datan de la década de 1960. Un tanque, un lanzagranadas ruso y un puñado de ametralladoras es todo lo que tienen para luchar. Por el contrario, los combatientes de ISIS cuentan con el armamento robado al ejército iraquí o a EEUU, tras los fallidos lanzamientos desde el aire. No tienen más remedio que luchar con lo que tienen - a pesar de las promesas huecas de EEUU y Europa de armarles adecuadamente. Uno de ellos ha vuelto a Irak desde Londres, donde ha vivido durante muchos años. Su AK-47 es, de hecho, de la década de 1960. "Mi arma es un AK47. Ahorré mi propio dinero y lo compré en el mercado negro para luchar contra ISIS para salvar a mi país", dice con orgullo. 'Por supuesto que queremos mejores armas, pero no tenemos otra opción”. Muchos de los hombres tienen cicatrices de la sangrienta Primera Guerra del Golfo de mediados de 1980, cuando se enfrentaron con Irán contra las fuerzas leales a Saddam Hussein. Algunos emigraron a Europa en busca de una vida mejor para sus familias. Pero, en medio de una nueva amenaza a su patria, han regresado para luchar. Fotos: Iberpress
